La reina Sofía siempre se ha comportado ante Felipe y Letizia porque nunca ha pretendido dañar el reinado de ambos, especialmente por su hijo, el amor de su vida. Hay muchas cosas que no le parecen correctas y con las que no está de acuerdo, pero ella se ha mantenido en su papel de emérita, como siempre. En la vida privada le ha aconsejado como madre. A la mujer de Juan Carlos le duele profundamente ver a la familia completamente rota en dos bandos. Desde hace años la corona se distanció de los Borbones. La reina ha conseguido alejar a las infantas Elena y Cristina, como a sus hijos, y a Juan Carlos. La hermana de Irene es la única que se mantiene en los Presupuestos Generales del Estado y continúa con sus funciones institucionales dentro de la corona.
Este verano pretendía que fuese especial. Debido a su edad, aunque no tiene ningún problema de salud por ahora, sabe que le quedan pocos veranos en Palma de Mallorca. Habrá un momento que no será conveniente desplazarse hasta la isla balear y pasar tantos meses sola con su hermana. Por este motivo vio una buena ocasión para reunir a toda la familia de nuevo, sin Juan Carlos. Ella quería solo a sus nietos. Pasar un día con sus ocho nietos. Se lo comunicó hace semanas a sus hijos. Las infantas Elena y Cristina se mostraron a favor y no pusieron ningún impedimento, de hecho ya habían comprado los billetes para la primera semana de agosto, pero sus planes han cambiado. Felipe, lógicamente, tenía que consultárselo a Letizia. No da ningún paso sin su aprobación, y menos en cuestiones personales.
Letizia entorpece el sueño de Sofía
Como era de esperar, Letizia se negó en rotundo a facilitar ese reencuentro entre primos. Leonor y Sofía no se juntarían con ellos y mucho menos con Froilán y Victoria Federica. La reina no quiere que enturbien la imagen de las adolescentes. Así que Sofía se tuvo que quedar sin su gran sueño, lo que provocó de nuevo un fuerte distanciamiento entre reinas.
Curiosamente, unas horas más tarde de la llegada de Letizia a Marivent, la reina Sofía se marchó a Granada por un acto institucional que casualmente estaba programado desde hace meses, pero del que no ha aparecido ninguna sola fotografía. De esta forma, la emérita no se fotografiará con la familia por las calles de Mallorca, ya que volverá justamente cuando se vayan, mucha casualidad.
Felipe VI está harto del trato que se le está dando a su familia, totalmente inmerecido, y ya no aguanta más esta situación. Una vez más, Letizia y él han tenido una fuerte discusión por la humillación pública a Sofía. No es la primera discusión por este tema y vuelven a sonar rumores de divorcio.