Felipe VI vive entre la espada y la pared. Se enamoró de Letizia, pero no sabía que Juan Carlos y Sofía no la iban a aceptar, pero mucho menos que la ahora reina se iba a vengar cuando tuviese ocasión del trato recibido. El caso Nóos y las polémicas del emérito fueron la excusa perfecta para iniciar su plan. La monarca obligó a su marido a retirar a todos los miembros de Casa Real de los Presupuestos Generales del Estado y quitarles sus funciones institucionales. Era la primera gran medida para limpiar la imagen de la corona, todo lo que estuviese relacionado con el emérito solo podía ensuciarla. Le obligaron a abdicar y unos años más tarde a vivir en el exilio para que dejase de estar en el foco mediático.
Con la única que no ha podido es con una mujer que le hace sombra, se trata de la reina Sofía, quien estaba convencida que ella no podía ser mejor reina. Sin embargo, le demostró que reina se hace, no se nace. A Letizia le hubiese gustado separarse de la emérita, pero no lo ha conseguido. Felipe ha querido mantenerla a su lado. Es la única que cobra un sueldo del Estado y mantiene unas mínimas funciones, cada vez menores debido a la edad. Nunca se ha decantado por un bando ni por otro, ella tiene claro que nunca traicionaría a su hijo, el amor de su vida.
Sin embargo, la reina Sofía recibe una humillación tras otra por parte de toda la familia, especialmente de Juan Carlos y Felipe, de este último no se lo podría haber imaginado nunca. Aunque lo tolera porque es su hijo y sabe que es culpa de Letizia. Lejos de poner sus órdenes como rey, siempre escucha a la reina y actúa en consecuencia.
La reina Sofía no ha podido reunir a todos sus nietos por culpa de Letizia
Este verano la reina Sofía reunió a todos sus hijos para pedirles sacar la bandera blanca tan solo unas horas y hacerse una fotografía con ellos y sus ocho nietos. Tenía ganas de ver a toda la familia reunida, algo que no sucede desde hace una década. Sin embargo, aunque Felipe se mostraba dispuesto, Letizia ha vuelto a decir no. No quiere que Leonor y Sofía se relacionen con Froilán y Victoria Federica, son unas malas influencias.
La reina Sofía se ha quedado triste, encerrada en Marivent, con el único apoyo de su hermana Irene. Ahora tiene que fingir que le interesa estar al lado de Letizia y poner la mejor de sus sonrisas, cuando realmente no la puede ni ver, pero así lo manda el protocolo. Esta nueva humillación por parte de los reyes habría sido el mayor golpe para ella. Ya no perdona a su hijo, son demasiados desplantes. Ella se ve muy mayor y cree que ya nunca más los va a ver a todos juntos.