Antes de Letizia, el rey Felipe VI estuvo enamorado como un adolescente. El actual soberano español tuvo un amor que fue frustrado por su familia debido a unas fotos comprometedoras que salieron a la luz de su entonces novia.
Se trata de Eva Sannum, quien fue la novia del entonces príncipe de Asturias durante cinco años, desde 1997 hasta 2002. Ambos se conocieron gracias al príncipe Haakon de Noruega (ex novio de ella) en el verano de 1997, después ella se instaló en Madrid contratada por una agencia de modelos de un amigo del rey Felipe mientras continuaba con sus estudios como publicista.
Ella era una modelo y periodista noruega cuando conoció a Felipe. La pareja se mostró muy enamorada en público, y su relación fue muy seguida por la prensa.
En aquella época, un joven Felipe estaba convencido de que Eva Sannum era la candidata perfecta para ser su esposa y convertirse en reina de España, sin embargo, ella era extranjera, no tenía ni idea de la situación de España, no era católica y, además, salió en unas fotos posando como modelo de lencería, tal y como explica José Apezarena en ‘Los hombres de Felipe VI’. Todo eso le puso muy difíciles las cosas.
"Empezaron a publicarse artículos en contra de ella, propiciados desde círculos cercanos a palacio. Se hicieron encuestas en las que la opinión sobre Eva era negativa. Todo jugó en su contra", añadió el autor, por lo que no le quedó más remedio que romper la relación por fuerza mayor. Aquellas fotografías destrozaron su imagen y podían hacerlo con la corona.
La vida actual de la exnovia de Felipe VI
Poco se sabe de acerca de la vida de Eva Sannum tras su ruptura con Felipe VI, ya que ella misma ha sido la que ha intentado evitar siempre a toda costa a los medios de comunicación, manteniéndose en el anonimato el mayor tiempo posible, así como detalla Antena 3 en su sitio web.
Pero hace unos años atrás Eva Sannum concedió una entrevista para el diario Aftenposten en la que reveló que estaba muy contenta de no haberse convertido en la reina de España, entre otras cosas, porque nunca llevó bien que se conociese cada una de las cosas que hacía a diario.
"La gente probablemente piensa que sería una vida con yates y champán. Pero no se dan cuenta de que es muy agotador. Es una vida llena de limitaciones", precisó sobre la vida que deben llevar los miembros de la corona.
De igual forma, también culpa en parte que nadie le explicase en su momento cómo debía comportarse al ser la novia del futuro rey. "Me identifico con venir de algo completamente diferente, con formar parte de una familia tan especial. Pero a mi nunca nadie me aconsejó como debía comportarme", explicaba ella misma.
Pero tras romper con Felipe debido a la gran polémica que generaron las fotos en lencería de la modelo, no se supo más nada de ella, hasta ahora. Actualmente, la noruega lleva la vida de una mujer independiente y profesional, muy alejada de la que hubiera sido de haber tenido éxito su relación con el rey. Estudió comunicación y durante años trabajó para una de las grandes empresas noruegas además de ser miembro de la PFU.