Felipe VI y Letizia no atraviesan uno de sus mejores momentos. Pilar Eyre desveló hace unos meses que el matrimonio ha hecho frente a importantes discusiones, algunas han puesto en jaque la relación, hasta el punto de hablar de un sonado divorcio. Eso sucedió cuando la corona se vio salpicado por el caso Nóos. Fueron unos momentos muy complicados para la monarquía española. La reina pidió al rey poner una barrera con los Borbones. A día de hoy, la asturiana ha roto cualquier relación con su familia política. Por culpa de ella, prácticamente no ve a sus padres ni a sus hermanas, ni tan siquiera a sus sobrinos.
A Letizia le molesta que Felipe se relacione con su familia. Por este motivo, el rey intenta mantener el contacto de forma privada. Cristina y Elena están muy descontentas con el trato a toda la familia y prácticamente no le hablan. Sin embargo, la reina Sofía no puede dejarle de lado, es el amor de su vida, el niño de sus ojos.
Felipe se escapa por las noches
La reina Sofía vive en Zarzuela, en el mismo recinto de El Pardo, a escasos metros del pabellón del príncipe, donde vive su hijo y hasta hace poco sus nietas. Sin embargo, ni tan siquiera podía verlas. Felipe VI era quien se acercaba todos los días a la casa de su madre para ver cómo estaba y pasar un rato con ella. Lo hacía una vez que terminaba de cenar, cuando Letizia ya se había acostado. Siempre muy discreto, ajeno a la prensa y también a su mujer.
Entre la reina Sofía y Letizia siempre ha existido una cierta rivalidad. La emérita le enseñó a ser reina, pero cuando cogió el trono se olvidó de ella y consiguió llevarse todo el protagonismo, ahora ya no la trata con la jerarquía debida. Según Vanitatis, este comportamiento responde también a que “hay competencia entre ellas”. “Sofía nunca ha abandonado su papel de reina y mientras la mayoría de su entorno la trata como tal, la reina Letizia ya no la trata con tanto protocolo y eso a provoca ciertas incomodidades”, publica el medio de comunicación.
A pesar de ello, Felipe mantiene una buena relación con su madre. Letizia habrá separado a toda la familia públicamente, pero no de forma privada. El rey siempre ha ayudado a la emérita, la considera una víctima de todos los tejemanejes de Juan Carlos, por este motivo es la única persona que se ha mantenido en la institución con el cambio generacional.
Tal y como pudo corroborar Vanitatis, Felipe visita a su madre todas las noches, siempre que su agenda se lo permite, para darle las buenas noches. Ya que se encuentra en el recinto de Zarzuela, totalmente protegido, lo hace sin escoltas, y sin que se entere Letizia. También visita a Irene de Grecia, estos últimos meses con mayor atención desde que se desvelase que sufre la enfermedad del olvido.