Parece que Felipe VI y la infanta Cristina han hecho las paces desde que la madre de los Urdangarin se divorció de Iñaki. El monarca la apartó de la corona cuando estalló el caso Nóos y ella se decantó por el padre de sus hijos. Perdió todas las funciones institucionales y el sueldo que percibía por ellas. En varios actos, tanto institucionales como familiares, se les ha visto juntos con una gran complicidad, tal vez hablando de problemas personales, como puede ser la salud de sus progenitores, o la relación con sus hijos.
La infanta Cristina se ha enfrentado a un año complicado con sus hijos. Los Urdangarin han dado demasiados quebraderos de cabeza a la hermana de Felipe VI, especialmente Irene y Miguel. Cuando Cristina anunció el divorcio y aparecieron las fotografías de la infidelidad de Iñaki, la benjamina de la familia bajó su rendimiento escolar hasta casi repetir curso. Su intención era quedarse cuatro años más en Ginebra con su madre mientras cursaba Administración y Dirección Hotelera en la prestigiosa universidad de Lausana, pero no superó las pruebas de acceso. Así que decidió marcharse a Madrid para su año sabático. Por su parte, Miguel también realizaba un curso de monitor de esquí, que suspendió al sufrir una lesión. El joven se marchó con su hermana al palacio de la Zarzuela.
Felipe VI y Letizia no querían que estuviesen muchos meses allí, además de la seguridad porque no querían que estuviesen sin hacer nada en pleno foco mediático. Por ello, la infanta Cristina les obligó a marcharse al Reino Unido con Juan Urdangarin. Irene ahora mismo estudia organización de eventos en la universidad de Oxford, pero Miguel no encuentra su sitio. Ya terminó su carrera en ciencias del mar y no encuentra trabajo. Trabajó como becario, pero no le renovaron el contrato.
Miguel Urdangarin sale de fiesta todos los días y se preocupa poco por encontrar trabajo
Miguel Urdangarin, como Irene, se ha buscado novia en Madrid, Olympia, una joven que conoció en Ginebra cuando estudiaba. El joven solo piensa en ella y en viajes discretos a la capital. Ella también aparece por Reino Unido. Ahora que se ha curado de su lesión sale mucho de fiesta y no se preocupa de otra cosa. Parece que quiere aprovechar al máximo ese año sabático que estaría a punto de terminar.
La infanta Cristina pidió ayuda a Juan Carlos I para que le buscase trabajo, ahora ha sido Felipe VI quien también se ha ofrecido para alejar a Miguel Urdangarin de las malas compañías.
