Felipe VI ha evitado verse públicamente con sus hermanos y su padre para no perjudicar a la corona, especialmente con Juan Carlos. En los últimos meses la relación había mejorado notablemente, aunque el último movimiento del emérito la ha enfriado. El rey está siempre en contacto permanente con el emérito por su delicado estado de salud, por ello sus visitas a España son cada vez más frecuentes.

Felipe VI ha encargado a su hermana Elena que supervise a su padre y le mantenga informado en todo momento sobre sus movimientos, especialmente en relación con su estado de salud. Aunque Juan Carlos sigue viéndose como un hombre invencible y desea evitar el paso del tiempo, tiene 86 años y su salud es frágil. Desde hace más de diez años, enfrenta serios problemas de movilidad y ha pasado por varias cirugías de cadera. Su médico ya le ha advertido que su futuro está en una silla de ruedas, la cual ya usa cuando no hay cámaras presentes, aunque prefiere que nadie lo vea en esa situación. Por ello, antes de compromisos en España, acude a su médico de confianza en Vitoria para someterse a tratamientos regenerativos con células madre y plaquetas.

Juan Carlos I

Los graves problemas de salud de Juan Carlos, necesita ayuda 

El empeoramiento de Juan Carlos es tan notable que ya ni tan siquiera puede participar en las regatas de Sanxenxo sin ayuda. Por ello le acompañan sus trabajadores y la infanta Elena. Hay que ayudarle a entrar a su barco, el Bribón, y se ha tenido que adaptar el asiento a sus necesidades especiales para que pueda permanecer más tiempo sin perjudicarse.

Sin embargo, la movilidad no es su única preocupación. Juan Carlos ha comenzado a experimentar pequeños olvidos, lo que le inquieta mucho, sobre todo tras ver el caso de Irene de Grecia. Está preocupado por la posibilidad de perder su memoria y no reconocer a sus seres queridos, ya que no desea depender de los demás. La infanta Elena, en su más reciente visita, ha informado a Felipe VI de un notable deterioro en la salud de su padre. Ha observado que Juan Carlos no recordaba a algunos amigos y que le costaba recordar qué había hecho en el día. Esta situación ha generado alarma en Zarzuela, donde ahora están considerando si ha llegado el momento de traer a Juan Carlos de vuelta a España.

Juan Carlos I