La historia de amor entre Felipe VI y Letizia Ortiz parecía sacada de un cuento de hadas. Sin embargo, los últimos años han revelado una serie de acontecimientos que dejaron cicatrices profundas en su relación, afectando incluso los planes del monarca de ampliar su familia. El nacimiento de un tercer hijo, un hermano o hermana para Leonor y Sofía, nunca llegó a materializarse, y los motivos son tan sorprendentes como polémicos.

Felipe, tras romper con Eva Sannum, conoció a Letizia en una cena organizada por Pedro Erquicia. En ese momento, Letizia era una destacada presentadora en TVE, y Felipe quedó cautivado por su carisma y ambición. Aunque al principio parecía que ambos estaban libres de compromisos, luego se supo que Letizia mantenía una relación con Jaime del Burgo y estaba vinculada sentimentalmente con David Tejera, lo que complicó el inicio de su romance con el príncipe.

Felipe Letizia boda Telecinco

La reina Letizia quiso dejarlo todo

A pesar de los rumores, Felipe apostó por la relación y finalmente contrajo matrimonio con Letizia. Sin embargo, poco después de la boda, surgieron problemas. Se descubrió que Letizia había retomado el contacto con Jaime del Burgo, incluso durante su embarazo de las infantas Leonor y Sofía. Y también que hizo planes para mudarse a Estados Unidos, dejarlo todo, e iniciar  una nueva vida con Del Burgo, con el que pretendía tener un hijo por vientre de alquiler. Este vínculo fue investigado por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), lo que desató una crisis dentro de la Casa Real.

Felipe VI deseaba tener más hijos y seguir el modelo de su familia, compuesta por tres hermanos: Cristina, Elena y él mismo. Sin embargo, la relación con Letizia sufrió un golpe irreversible cuando el monarca descubrió la infidelidad de su esposa y sus intentos de alejarse de él. La desconfianza creció hasta el punto de que la pareja dejó de compartir la misma cama, poniendo fin a cualquier posibilidad de tener más descendencia.

Felipe VI renunció a la posibilidad de ampliar la familia

En este sentido, las fuentes especializadas han apuntado que la crisis entre Felipe y Letizia empezó en 2012, coincidiendo con el estallido del caso Nóos. Ahora muchas de estas fuentes apuntan al descubrimiento de las infidelidades por parte de Felipe como el detonante del distanciamiento.

Letizia y Jaime del Burgo foto juntos cuando eran amantes TV3

Este episodio también influyó en el contexto político. Se modificó la Constitución para garantizar que la primogénita pudiera heredar el trono, eliminando la preferencia del varón. Aunque este cambio aseguraba la línea sucesoria, no evitó que Felipe lamentara no haber tenido más hijos.

El intento de divorcio, que nunca se hizo público, marcó un antes y un después en la relación. La convivencia se transformó en un acto protocolario, y cualquier plan de ampliar la familia quedó descartado. Hoy, con el paso del tiempo, el sueño de Felipe de tener otro hijo es biológicamente imposible, tanto por la edad como por la falta de relación íntima con Letizia.