Felipe VI se enamoró de Letizia desde el primer momento que la vio en televisión como presentadora de informativos de TVE. Urdió un plan para poderla conocer. Todo sucedió en una cena organizada por Pedro Erquicia en su ático en la que coincidieron ambos. Los dos estaban solteros. La ahora reina salía de una relación larga y complicada con Alonso Guerrero, mientras que el rey había roto con Eva Sannum.
El entonces príncipe tenía claro que quería casarse con una mujer por amor, por este motivo solo se enamoraba de plebeyas y renunciaba a las aristócratas que les presentaban sus padres. No quería vivir un matrimonio como el de Juan Carlos y Sofía, infeliz. Tenía claro que Letizia sería la madre de sus hijos. Al emérito no le gustó la idea. Era una plebeya, pero también estaba divorciada de su profesor de instituto, de quien se enamoró con tan solo 17 años, sus padres estaban divorciados, se definía como agnóstica, incluso era republicana, y periodista. Podía buscarles la ruina.
Letizia demostró que reina se hace, no se nace. Además, han formado un consolidado matrimonio que celebrará el próximo mes de mayo las dos décadas casados. Felipe VI conoció de primera mano toda la vida de la entonces periodista. Ella le fue totalmente sincera, y eso es un gesto que el príncipe valoró muy positivamente. Le contó episodios de su vida que debía saber, y el hijo de Juan Carlos se encargó de borrarlos para que no quedase ni un rastro.
Alonso Guerrero ha asistido a cenas con Felipe y Letizia
En alguna ocasión Felipe VI ha coincidido con el pasado de Letizia. Conoció a su primer gran amor, Alonso Guerrero. Se casaron en el 1998 tras más de una década de relación con idas y venidas hasta que dos años después decidieron poner punto y final a su matrimonio.
Tal y como explicó en alguna ocasión el profesor de literatura, su relación con Letizia y Felipe es cordial a día de hoy. "La relación que mantiene tanto con la reina como con el rey es absolutamente normal" y que, incluso, "ha sido invitado a algunas cenas que se han celebrado en el marco del Palacio de la Zarzuela". Siempre ha defendido su silencio sobre su matrimonio con la entonces periodista, es más, incluso ha declarado que "le llegaron a ofrecer 300.000 euros por una fotografía de su enlace". Letizia siempre ha valorado que nunca haya hablado mal de ella y que se haya mantenido en silencio todos estos años, sabe que ofertas no le habrán faltado. El extremeño se convirtió durante los primeros años del 2000 en la persona más perseguida del país.
“Mi matrimonio con la reina Letizia es una situación pasada y superada. Nunca hablo de ello y me resulta muy aburrido volver a ello”, decía en una entrevista.