Desde su llegada a la familia real, la reina Letizia ha perpetrado muchos cambios en la monarquía. Su mayor preocupación es asegurar el futuro reinado de su hija, la princesa Leonor. En una ocasión, le soltó a su esposo, el rey Felipe VI: “A este paso tu hija no será reina…”. Y por eso la consorte lleva años esforzándose por cambiar la mala imagen que dejó su suegro, el rey emérito Juan Carlos I.
El emérito no ha sido el único en sentir el 'efecto Letizia'. Otros miembros de la familia real también han sufrido las consecuencias de su llegada, como la infanta Cristina y su aún esposo, Iñaki Urdangarin. Letizia quiso alejar de la casa real todo lo que tuviera olor a corrupción, y el escándalo del caso Nóos fue la condena de Iñaki, así como de su mujer, que siempre le apoyó.
La reina Letizia hace limpieza en la Zarzuela
La infanta Elena tampoco ha salido ilesa de la situación. Los escándalos y el comportamiento controvertido de sus hijos, Victoria Federica y Froilán, además del respaldo que siempre ha mostrado hacia su padre, han sido detalles que no ha dejado pasar Letizia.
Pero no todo ha alejar las polémicas de la Zarzuela. La reina Letizia ha tomado medidas incluso en la decoración del palacio, modernizando su ambiente. Entre los cambios realizados, retiró los retratos de Juan Carlos, que no eran precisamente pocos.
Diferencias de opinión sobre una decisión del rey Felipe VI
Ahora, en su incansable misión por preservar la imagen de la monarquía, Letizia tiene un conflicto abierto con su esposo, el rey Felipe VI. Si no hay sorpresas, el monarca planea proponer a Pedro Sánchez como candidato a presidente del nuevo Gobierno. Esto no le hace ni pizca de gracia a Letizia.
La reina no es partidaria de la amnistía ni el perdón para los implicados en el 'procés', ya que considera que podría poner en peligro el reinado de Leonor. No está de acuerdo en que Felipe, en un intento de mantener un perfil cordial y pacificador, acepte que Pedro Sánchez pueda ser presidente gracias a acuerdos con los independentistas. Aunque se conoce que la reina es de izquierdas, prefiere que Felipe insista en Alberto Núñez Feijóo, que le garantiza la continuidad de la monarquía mucho más que Pedro Sánchez, aunque ello implique unas nuevas elecciones.