Felipe y Letizia forman el único matrimonio de Casa Real que se mantiene en pie. Este año han celebrado los 20 años de su compromiso, y el año que viene será el momento de las dos décadas de casados. Juan Carlos y Sofía no se han divorciado, pero viven separados desde hace años, la infanta Elena fue la primera en divorciarse de Jaime de Marichalar, y actualmente es la infanta Cristina quien se encuentra en ese proceso. Sin embargo, el matrimonio formado por los reyes no ha sido un camino de rosas. Nadie se lo ha puesto fácil, y es que desde el primer momento la actual reina no fue querida. Juan Carlos le hizo el vacío e intentó que su hijo se divorciase.
Letizia es una mujer fría y calculadora, demasiado controladora. Es quien pone los puntos sobre las íes y quien toma las decisiones, aunque Felipe sea quien las ejecuta. En el matrimonio han vivido varias discusiones, la mayoría de ellas por culpa de la familia Borbón. En el bautizo de Irene Urdangarin no dejó que los padres de Iñaki durmiesen en Zarzuela. Tampoco quiso acudir a la fiesta de celebración de los 40 años del exduque de Palma. Está enemistada con las hermanas de su marido, Elena y Cristina. Éstas siempre se han quejado de que nunca se les ha tendido una mano en sus momentos más complicados. Sin embargo, la discusión más actual ha sido la que está relacionada con la formación militar de Leonor. Pilar Eyre describe que "Han sido días sin hablarse, portazos y gritos y todo ha sido escuchado por el personal que trabaja con ellos”.
Letizia no querría asistir a la boda del príncipe Hussein por Juan Carlos I
Ahora Felipe y Letizia se encuentran en una nueva encrucijada, y es que han recibido una invitación para la boda del año y no saben si asistir o no. Más bien es la reina la que no quiere ir por una sola razón, Juan Carlos I. El heredero al trono en Jordania, el príncipe Hussein, se casa con la joven arquitecta saudí Rajwa Al Saif, el próximo jueves 1 de junio en Ammán. Todas las monarquías del mundo han recibido la invitación y acudirá una representación de todas ellas.
Como ya sucedió con Juan Carlos, que tuvo una estrecha relación con el padre del príncipe, ya fallecido, Felipe VI guarda una cordial relación con Hussein. Letizia también conectó con Rania de Jordania, la actual reina. Pero saben que el emérito acudirá en calidad de amigo, ya que no tiene ninguna responsabilidad institucional, ni tampoco se puede prohibir su asistencia porque ya no pesa ningún cargo sobre él. Si acude el emérito, la reina no va. No quiere que aparezcan imágenes comprometidas de los actuales reyes con el exmonarca después de su esfuerzo estos últimos años por deslibrarse de la imagen que dio de la corona.
Juan Carlos se reencontrará con la reina Sofía, que sería la representante que Casa Real enviaría de España. Felipe ha hecho todo lo posible porque Letizia entre en razón. De todos modos vaciaron toda su agenda para este fin.