No es ningún secreto que la reina Letizia y la Iglesia son como el aceite y el agua. La consorte no es fan en absoluto de los actos religiosos. Tampoco comulga ni se santigua cuando, por obligación, ha tenido que hacer acto de presencia en alguna misa o ceremonia católica. Felipe, aunque algo más respetuoso con la institución, tampoco muestra mucha pasión hacia las creencias cristianas. Desde que es rey de España, la corona se ha ido distanciando irremediablemente de la Iglesia, dentro de una estrategia de modernización de la monarquía.
Aunque distanciarse no es el peor gesto que Felipe VI y Letizia ha hecho con la Iglesia. La pareja real ha violado uno de los 10 mandamientos del catolicismo, el de no mentirás.
Lo hicieron antes de casarse, precisamente para asegurarse de que la boda se llevaría a cabo. Lo reveló el primo de Letizia, David Rocasolano, en su libro ‘Adiós, princesa’. Nos referimos al episodio del aborto de la consorte y la ocultación de las pruebas para garantizar que podrían completar el enlace matrimonial.
Las mentiras de Felipe VI y Letizia a la Iglesia
Según el relato de Rocasolano, Letizia se había sometido a un aborto en la Clínica Dator de Madrid. Un percance del que el propio Felipe pidió a David eliminar todos los documentos. De haberse sabido, ni la Iglesia ni la reina Sofía habrían permitido el enlace. "El aborto es legal desde 1985 pero la ley de la Iglesia lo considera un sacrilegio castigado con la excomunión. Es decir que quien aborta es expulsado de la comunidad de fieles y excluido del sacramento de matrimonio", apunta Rocasolano. "Al primo le resulta hipócrita que Letizia comulgue con una institución que está en contra del derecho a abortar. La reina Sofía y la Iglesia no hubieran consentido la boda si supieran que había abortado”, añade Leonardo Faccio en el libro ‘Letizia, una reina impaciente’.
Letizia aseguró haberse convertido en una versión corroborada por Felipe VI
Pero las mentiras hacia la Iglesia no terminan aquí. Felipe y Letizia pactaron que la consorte se haría pasar por convertida antes de la boda. "He visto la luz. Cuando conocí a Felipe vi la luz de la fe católica", le dijo al arzobispo de Madrid para justificar que antes se hubiera casado por lo civil y ahora quería casarse por la iglesia.
Mentiras que mantuvieron cuando fueron a ver al Papa Francisco. Entonces volvieron a hacerse pasar por católicos devotos. "Una amiga de Letizia de EFE me dijo que la reina ha dado la vuelta a sus principios uno a uno: Letizia era la primera que se cagaba en Dios y se ha puesto la mantilla para ir a ver al Papa. El primo me dijo que verla rezar es alucinante. El paradigma de esta sociedad hipócrita", añadía Faccio.