A medida que se acercan las festividades navideñas, la Zarzuela ya tiene definidos los planes para la tradicional cena de Nochebuena. Sin embargo, este año, la organización refleja tensiones familiares más marcadas que nunca. Según lo revelado por la periodista Pilar Eyre en un artículo para la revista Lecturas, la familia real española celebrará dividida en dos núcleos claramente separados.
Por un lado, la reina Sofía y su hermana, Irene de Grecia, conocida cariñosamente como "tía Pecu", compartirán una velada tranquila y privada. Esta división se ha convertido en costumbre en los últimos años, manteniéndolas al margen de la mesa principal.
Los preparativos navideños están en marcha en Zarzuela
La razón detrás de esta dinámica, aunque no oficial, parece ser el deterioro de la relación entre Sofía y la reina Letizia, cuya influencia en las decisiones familiares vuelve a ser evidente después de un tiempo en la nevera por las revelaciones de Jaime del Burgo que estos días cumplen un año.
La cena principal, que tendrá lugar en el Pabellón del Príncipe, contará con la presencia de Felipe VI, Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, pero no será un encuentro íntimo de solo cuatro miembros. Según Eyre, el lugar que tradicionalmente habría ocupado Sofía será cedido a Paloma Rocasolano, madre de Letizia, y su pareja, Marcus Brandler. Este gesto destaca un intento de la reina consorte por fortalecer la presencia de su propio entorno familiar.
Juan Carlos I monta un fiestón en Ginebra
Por otro lado, mientras la familia real divide sus celebraciones en Madrid, a más de 1.400 kilómetros, en Ginebra, se llevará a cabo una reunión completamente distinta. El rey emérito Juan Carlos I, alejado de los focos y de España, pasará la Nochebuena en el lujoso Hotel Four Seasons, acompañado por su amante de años, Marta Gayá, así como por sus hijas, las infantas Elena y Cristina. También se espera la presencia de algunos de sus nietos y sus respectivas parejas.
Estos planes, aunque lejos de Madrid, no han pasado desapercibido para Felipe VI, quien está especialmente molesto por la inclusión de Marta Gayá en la reunión familiar. Felipe no oculta su rechazo hacia esta figura, ya que la relación de su padre con Gayá ha sido fuente de profundo dolor para la reina Sofía durante décadas. El actual monarca nunca ha aprobado la presencia de Marta en la vida de su familia, considerándola una influencia negativa que ha agravado las tensiones familiares.