Felipe VI y Letizia se enfrentan a uno de los mayores cambios en su vida. Los reyes vuelven a vivir solos tras 18 años. Por primera vez en su relación, ambas hijas se encuentran fuera de casa, y no volverán en una larga temporada. Durante los próximos tres años Leonor realizará la formación militar obligatoria para un Jefe de Estado, y en estos dos años, Sofía cursará bachillerato internacional en el UWC Atlantic College de Gales. La reina es quien más ha notado la ausencia de sus hijas, por este motivo ha hecho importantes cambios en su agenda institucional para este nuevo curso. Será ella quien se encargue de los viajes internacionales y no la reina Sofía. De esta forma podrá estar varios días fuera de casa y distanciarse de Felipe para evitar los típicos roces de la convivencia.

El rey también hace su vida por separado. Entre sus compromisos institucionales ha aprovechado para volver a Palma de Mallorca, la tercera vez este verano, para visitar a su madre, quien este año no ha recibido ni una sola visita familiar más allá de los reyes y sus hijas. Está más sola que nunca, solo cuenta con la compañía de su hermana Irene.

Felipe VI en Palma de Mallorca Boedga
Felipe VI en Palma de Mallorca Boedga

Felipe VI pasa unos días en Palma de Mallorca con sus amigos y la reina Sofía 

El monarca también aprovechó para reencontrarse con alguno de sus amigos del club náutico, con los que Letizia no tiene la más mínima relación. Cenaron en la Bodega Barahona-Casa Manolo de ses Salines, el mismo lugar en el que estuvo con la reina el primer verano de casados en la isla balear.

El dueño del local, Manolo Barahona, le recordó a Felipe VI ese momento. Le enseñó el rincón donde se sentaron aquel día, la mesa y las dos silla, todo estaba exactamente igual. Encima de la mesa, la comanda de lo que cenaron aquella noche.

Felipe con su Aifos y su equipo
Felipe con su Aifos y su equipo

Orgullosos de la visita, la familia Barahona manifestó que “el mes de agosto no podía terminar de mejor manera para nuestro equipo y familia de Bodega Barahona-Casa Manolo, con la visita real. Después de esta temporada de verano ha sido como una recompensa a nuestro esfuerzo diario. Estamos muy orgullosos del equipo humano que forma parte de nuestro restaurante”. “Valoramos y agradecemos de corazón que don Felipe VI haya vuelto a hacernos una visita”, comentaron, y “su cercanía y simpatía hace de él una gran persona además de demostrar cada día su talante y esfuerzo por hacer de España un país mejor”, añadió la familia. Como le sucede siempre que aparece por algún restaurante, no duda en fotografiarse con sus trabajadores. Mientras tanto, Letizia se quedó en Madrid completamente sola.