Hace ya veinte años, el rey Felipe VI vivió un romance con Eva Sannum, una relación que terminó envuelta en polémica y finalmente se disolvió. En su momento, la relación enfrentó varios obstáculos significativos, entre ellos, la controversia generada por unas fotografías en las que Eva aparecía en topless y las diferencias respecto al estricto código ético impuesto por la Casa Real. Estos factores, sumados a la resistencia de la propia institución, desempeñaron un papel crucial en el desenlace de la historia. Esta situación recuerda en cierta medida a los desafíos que enfrentó Letizia Ortiz al incorporarse a la familia real, dado que los entonces reyes, Juan Carlos I y Sofía, mostraban reticencias hacia las parejas plebeyas.

La ruptura definitiva entre Felipe y Eva tuvo lugar el 14 de diciembre de 2001, en vísperas de las fiestas navideñas, y se ha convertido en un episodio que este año marca 21 años desde su acontecimiento. Aunque la pareja nunca confirmó oficialmente su noviazgo, las evidencias de su cercanía eran irrefutables. En aquel momento, Felipe se dirigió a la prensa para anunciar que, por motivos "estrictamente personales y particulares", ambos habían decidido tomar caminos separados en la vida.

Eva Sannum y Felipe
Eva Sannum y Felipe

Felipe VI y Eva Sannum mantienen su relación de amistad 

Por su parte, Eva trató de manejar la situación con elegancia. En declaraciones al diario noruego Dagbladet, respaldó las palabras del entonces príncipe y aseguró: "Felipe se manifiesta por los dos. Estamos de acuerdo en esta decisión, pero considero más adecuado que él lo comunicara. Es importante para nosotros dejar claro que ambos estamos unidos en esto". Aunque las razones concretas del fin de su relación dieron lugar a múltiples especulaciones, en la actualidad ambos conservan una relación cordial y han coincidido en algunos eventos públicos.

Eva Sannum ha demostrado, a lo largo de los años, una notable discreción sobre su vínculo con Felipe. Su silencio solo se ha roto en contadas ocasiones, y siempre de manera respetuosa. Hace aproximadamente un año, ella misma expresó que no lamentaba no haberse convertido en reina, algo que reafirma su decisión de alejarse del ámbito real. El último encuentro público entre ellos data de hace más de dos décadas, durante la boda de Haakon y Mette-Marit de Noruega.

La vida de Eva, marcada por su rechazo a la invasión mediática, ha seguido un rumbo alejado del escrutinio público. En una entrevista con un medio noruego, criticó la insistencia de la prensa por conocer cada detalle de su vida y desmitificó la idea de que la vida en la realeza fuera un constante lujo, describiéndola más bien como agotadora y llena de restricciones. Estas reflexiones la han llevado a identificarse con Meghan Markle, a quien ha defendido, reconociendo las similitudes en sus experiencias. Según sus palabras: "Entiendo lo que es venir de un entorno completamente distinto e integrarse en una familia tan especial. Sin embargo, como muchos señalan, quizás Harry debería haberle informado más sobre lo que eso implicaría".

Eva Sannum
Eva Sannum