Felipe y Letizia atraviesan un duro momento tras las declaraciones de Jaime del Burgo. Hacía una década que ocultaban el verdadero motivo de su sonada crisis en 2013. No es ningún secreto, Pilar Eyre o Jaime Peñafiel, entre otros, hablaron de las discusiones de los reyes, el malestar entre ellos en los actos institucionales se hacía cada vez más evidente. Los medios de comunicación ya preparaban el titular con el sonado divorcio, pero finalmente no se materializó. Sería un escándalo. Por ello, siguieron los pasos de Juan Carlos y Sofía, cesaron la convivencia pero continuaron juntos ante las cámaras.
El rey está totalmente desilusionado. Estaba muy enamorado de Letizia y siempre la ha defendido a capa y espada, no obstante, le ha engañado, y eso es algo que nunca perdonará. La mentira. De hecho, se casó con ella por su sinceridad, le reveló que tuvo dos abortos antes de casarse.
Jaime del Burgo destapó que había mantenido una relación con Letizia cuando ésta ya se había casado con Felipe y era princesa de Asturias. Los reyes no se distanciaron por los problemas de la corona, sino por su vida personal. Según la versión del abogado, la madre de Leonor y Sofía nunca fue feliz con su marido, nunca le quiso. Estaba con él por conveniencia. Se le presentó la ocasión, y ella que es tan ambiciosa, vio la oportunidad para convertirse en la mujer más poderosa del país. Pretendía fugarse con el ex de Telma Ortiz a Estados Unidos y formar una familia con un vientre de alquiler, ya se habían informado. Sin embargo, a día de hoy todo son habladurías. Ninguna prueba ha salido a la luz que confirme sus declaraciones, pero asegura que en breve publicará un libro con toda la verdad.
La última oportunidad de Felipe y Letizia para zanjar los rumores
Casa Real no ha confirmado ni desmentido las declaraciones de Jaime del Burgo, pero ha empezado una campaña para mejorar la dañada imagen de los reyes en estas últimas semanas. No solo reaparecieron en el cumpleaños de la infanta Elena, también se han dejado ver este fin de semana juntos en el cine. Con estas apariciones tratan de zanjar los rumores de una crisis e infidelidades.
Esta semana se acerca una fecha clave y es que este martes 30 de enero es el cumpleaños de Felipe. El rey cumplirá 56 años y no tendrá una gran celebración familiar porque ni tan siquiera sus hijas podrán venir a su cumpleaños, le felicitarán por teléfono. La princesa y la infanta intentarán escaparse este fin de semana para cenar en familia.
Se espera alguna fotografía de Letizia y Felipe saliendo a cenar de la forma más casual posible, como el pasado viernes en el cine. De esta forma demostrarán que entre ellos no sucede nada malo.