Letizia es una mujer muy ambiciosa, y se cree que nunca estuvo enamorada de Felipe, simplemente se le presentó la ocasión en aquella cena que organizó Pedro Erquicia en su ático de Madrid y aprovechó la oportunidad de convertirse en la mujer más poderosa de España, no había ningún otro escalón. Tal vez por ello una vez se casó con el entonces príncipe recuperó el contacto con Jaime del Burgo, quien según su versión, estaría enamorada. La madre de Leonor y Sofía se equivocó totalmente al formar parte de la familia real, no era lo que esperaba, el precio que debía pagar era demasiado alto, y no estaba dispuesta, pero ya no había forma de salir de aquel infierno.

Todos estaban en contra de ella, Juan Carlos I le hizo la vida imposible, por ello cuando tuvo ocasión juró que se vengaría de él. Y eso sucedió. Cuando se hicieron públicas sus fechorías, la ahora reina obligó a Felipe a que abdicase su padre. Unos años más tarde le asestó el golpe definitivo con el exilio, la mayor humillación pública que se puede hacer a un monarca. Se fue por la puerta de atrás. El marido de la reina Sofía nunca la perdonará y la culpa de todos sus males.

Felipe y Letizia

Felipe quemó el famoso diario de Letizia donde apuntaba todo 

Pero a Letizia siempre había que tenerla contenta porque es periodista y podía hacer mucho daño a los Borbón en caso de divorcio. En los inicios de la relación, la madre de Leonor y Sofía apuntaba todo en una especie de diario. Es una mujer muy controladora y calculadora y le gusta tener todo bajo control. Pilar Eyre ha recordado que “cuando protestaba, el ‘staff’ de la Zarzuela le decía: “Haga listas, señora”, y ella iba siempre con un cuadernito en el que apuntaba todo”. Pero ese famoso diario tenía que desaparecer porque si alguien lo encontraba o a Letizia le daba por filtrarlo se podrían revelar muchos secretos. En concreto, “hasta que Felipe se lo hizo destruir para que no cayera en manos ajenas”. Una destrucción de lo más significativa porque tal y como ha escrito Eyre, “cuando quemó esa especie de diario en la chimenea del palacio, quizás se dio cuenta también de que quemaba su pasado para empezar una nueva vida”.

Y es que Letizia tuvo que dejar muchas cosas atrás, como su carrera de periodismo. Pilar Eyre ha recordado que cuando la reina Letizia decidió priorizar su amor, “tuvo que dejar su profesión, que la apasionaba, y se trasladó a vivir a la sombría casa del príncipe, donde estuvo meses recibiendo clases de Protocolo, Historia, Inglés, Religión…”. Estuvo meses preparándose para ser princesa y tuvo que renunciar incluso a ella misma, no tenía ni voz ni voto, decidían por ella.

Letizia boda efe