La infidelidad ha sido siempre una de las aficiones favoritas de los Borbones. Una tradición que parece haberse detenido con el actual propietario de la Corona española, Felipe VI, quizás sensible al sufrimiento de su madre Sofía, que ha tenido que soportar mil y una relaciones extramatrimoniales de Juan Carlos I. El emérito siguió los pasos del padre, Juan de Borbón, pero especialmente del bisabuelo Alfonso XIII. El rey que se tuvo que largar después de la proclamación de la República y habiendo apoyado la dictadura de Primo de Rivera fue un mujeriego contumaz. De sus cuernos a Victoria Eugenia de Battenberg nacieron varias criaturas: por ejemplo, Leandro y Maria Teresa, fruto del romance con Carmen Ruiz de Moragas, pero también otra de la que no se habla tanto: Juana Alfonsa Milán.
Juana Alfonsa nacía después de que Alfonso tuviera lío con la niñera y profesora de piano de los chiquillos, la irlandesa Beatriz Noon. A pesar de ser ilegítima la reconoció como descendiente, no como los otros casos. La niña "era su favorita", explican en 'El Español', que añade que siempre se hizo cargo de la pequeña y de la amante, a la que expulsaron de la Corte. Años más tarde la niña se enredó con un príncipe ruso y tuvo tres hijos. Uno de ellos, Pierre Emmanuel Milán, es el padre del protagonista de esta historia: el extravagante modelo internacional Juan Alfonso Milán, que se destapa públicamente como primo de Felipe VI. Un personaje que reclama que quiere conocer a su familiar y rey.
Juan Alfonso tiene un look que ya nos gustaría ver en una recepción oficial de Zarzuela, jugando con las hijas del Borbón y Letizia. Estética rockera y oscura, lleno de tatuajes (tiene uno de una corona, y quiere hacerse una flor de Lis, símbolo de la Casa Real española) y complementos macarrillas. Parece un mimbro perdido de 'The Ramones', la verdad. El tipo sabe de su linaje y está muy orgulloso de formar parte del universo 'royal', aunque nunca haya sido invitado a tomar un té con pastas, ni una cerveza ni un lingotazo. Es igual, su devoción está por encima de estas minucias: "Es un monárquico convencido, juancarlista, felipista y admirador de la reina Letizia", aclaran en el texto. Y les dedica unos elogios que ya están tardando en llevarlo a Madrid desde Londres para convertirlo en el nuevo Manolo el del Bombo. "Estoy muy orgulloso, pero sí que es cierto que cuando me lo contaron, siendo tan joven, fue un shock. Pertenezco a la primera familia de España. Gracias a Alfonso XIII está aquí Felipe VI y estamos todos".
El hombre, nacido en 1991, vive lejos de España y de la actualidad. Va de moderno, pero no se puede ser más antiguo: "Juan Carlos tendría que estar en su país. No me gusta que la gente le eche en cara cosas. Estoy con ellos a muerte. Si fuéramos justos, deberíamos recordar todo lo que ha hecho por su país". Por si acaso omite todo aquello que le ha hecho huir a Abu Dabi, claro, y sigue con la matraca: "Mucha gente debería callarse un poco. No me gusta el trato que se le está dando al rey emérito. Habrá hecho algunas cosas, pero habría que esperar al juicio, si lo hay". En cuanto al primito que no ha conocido nunca y su mujer, todo es muy profundo: "Felipe VI es una persona que está muy bien preparada para el trono. Y encima lo veo un hombre muy guapo, con buenos trajes, buena presencia, buen físico... Letizia está guapísima. Los veo muy guapos a los dos". No hay más preguntas, señoría.
Felipe colecciona primos modelos. Este no lo conocíamos, pero hacemos una predicción: lo veremos seguro participando en algún concurso de televisión haciéndole la ola al monarca con una birra y un cigarrillo en la boca. Un Pocholo en versión real.