Desde su ingreso en la Escuela Naval de Marín el pasado 29 de agosto, la princesa Leonor ha estado bajo la lupa. Y lo que se ha observado no ha gustado ni entre sus superiores ni en la familia real. La joven ha acumulado suspensos y varias amonestaciones que dejan mucho que desear de una figura como la suya.

El estricto régimen de la Escuela Naval, con días que comienzan a las 06:45 horas y finalizan tras largas jornadas de clases y actividades físicas, ha supuesto un reto considerable para la heredera. En particular, el estado físico de Leonor ha sido señalado como un punto débil en su desempeño. Sus bajas calificaciones en las pruebas físicas y su incapacidad para adaptarse al nivel exigido han resultado en una evaluación negativa constante durante los últimos meses.

Leonor vestida con el uniforme blanco de la Marina
Leonor vestida con el uniforme blanco de la Marina

Leonor genera preocupación por su evolución en su formación militar

Además de sus limitaciones físicas, se ha señalado que Leonor ha llegado tarde en varias ocasiones, algo que contraviene las estrictas normas de la escuela. Su rendimiento se ha visto afectado por no ceñirse a las dietas y protocolos que son esenciales para mantener a los cadetes en condiciones óptimas. A esto se suma que sus salidas nocturnas, que han interferido en su capacidad de descanso y concentración.

En una situación normal, un cadete que acumulara tantas deficiencias enfrentaría una sanción severa, que podría incluir hasta cinco días de expulsión temporal del pelotón. Sin embargo, las reglas no parecen aplicarse de la misma manera a la princesa Leonor.

Felipe, Letizia y Leonor en Pontevedra
Felipe, Letizia y Leonor en Pontevedra

Ser hija del rey libra a Leonor de consecuencias graves

A pesar de que Felipe VI y Letizia pidieron que se tratara a Leonor como una más, su posición como heredera del trono le ha otorgado una condición especial. Ser hija del rey Felipe VI ha sido crucial para evitar consecuencias más graves.

Así, con toda la tranquilidad del mundo de que su indisciplina no tendrá consecuencias, Leonor se prepara para embarcarse en su experiencia a bordo del Juan Sebastián de Elcano. La fecha señalada es el 11 de enero.  Ese día comenzará una travesía de seis meses como parte de su formación militar.