Cuando Felipe VI asumió el trono, su prioridad fue distanciarse de la figura de su padre, Juan Carlos, quien representaba los escándalos y polémicas que pusieron en riesgo la estabilidad de la monarquía española. Renunció a la cuantiosa herencia de su progenitor, que ahora recaerá en sus hermanas, las infantas Elena y Cristina. Sin embargo, el patrimonio del actual rey es notable por sí solo, sin considerar el de los reyes eméritos.

Parte de este patrimonio incluye edificios y terrenos gestionados por Patrimonio Nacional, entidad encargada de los bienes del Estado relacionados con la Corona. A través de este organismo, se administran propiedades como palacios, parques, monasterios y obras de arte recibidas por los monarcas. Se busca rentabilizar estos activos de manera eficiente para evitar que supongan una carga económica.

Patrimonio Nacional tiene pisos que alquila a precios ‘asequibles’

Entre los activos gestionados por Patrimonio Nacional se encuentran viviendas que pertenecen al rey Felipe VI y la reina Letizia, las cuales están disponibles para alquiler a precios moderados. Estas residencias, ubicadas en edificios históricos, están abiertas al público en general. Aunque los arrendatarios tendrán como caseros a los reyes, no tendrán contacto directo con ellos para asuntos de mantenimiento.

pisos de felipe y letizia el escorial

En la página web de Patrimonio Nacional se puede encontrar un catálogo de residencias disponibles para alquilar, que cambia según la disponibilidad. Actualmente, cuatro pisos están disponibles en la localidad de San Lorenzo de El Escorial, al norte de la Comunidad de Madrid. Estos pisos forman parte de la llamada ‘Casa de la Reina’, una construcción histórica cercana al Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

Casi 3.000 euros al mes

Estos pisos en alquiler ofrecen una oportunidad única para vivir en un entorno histórico y privilegiado, con la ventaja adicional de tener como propietarios a los monarcas españoles. Sin duda, representan una opción atractiva para quienes buscan residir en una ubicación única con un toque regio. Eso sí: no son para cualquier bolsillo.

Entre los pisos disponibles, destaca el número dos, el más costoso, que cuenta con hall, salón, comedor, seis dormitorios, cuatro baños y cocina, distribuidos en 335 metros cuadrados. Desde sus ventanas, se disfruta de una vista privilegiada del monasterio. El precio de alquiler mensual de este piso es de 2.850 euros, lo que suma un total de 34.200 euros al año.