A Letizia la llaman “la mandona” y a Felipe “el calzonazos”. Son dos de los motes de los reyes según los amigos de Juan Carlos. La reina es una mujer fría y calculadora, y le gusta tener todo controlado. Nada escapa de su supervisión. Al rey no le queda más remedio que acatar sus decisiones y ejecutarlas, especialmente cuando se trata del ámbito privado.
Letizia ha conseguido vengarse de la familia real. Los ha apartado a todos de forma sibilina y estratégica. Todos le hicieron el vacío cuando llegó a Zarzuela por ser una plebeya, de padres separados, divorciada y presentadora de informativos. Finalmente, ha demostrado que no era ella quién iba a echar por tierra la imagen de la corona. Ahora ha puesto todos los esfuerzos en recuperarla, pero será sin la presencia de ellos. Juan Carlos I se encuentra exiliado en Abu Dabi y la reina Sofía ni tan siquiera puede acercarse a sus nietas.
La emérita contó en una ocasión que Letizia no le deja acercarse al pabellón del príncipe donde se encuentran sus nietas. No puede verlas a pesar de vivir a escasos metros. “¡No sé cómo están! ¡No las veo nunca! ¡No me dejan verlas!”. Unas declaraciones que dejaron sorprendidos a los allí presentes. Después continuó explicando su malestar: “Yo, que vivo al lado, no puedo ir a su casa ¡y sin embargo la madre de Letizia está siempre ahí metida!”.
La reina Sofía tiene celos de Paloma Rocasolano
La reina Sofía ama a sus nietas sobre cualquier cosa, pero no puede estar cerca de ellas. Siempre es Paloma Rocasolano quien se entromete. Como cualquier madre, Letizia apostaba siempre por su madre para que se hiciese cargo de sus hijas. La enfermera jubilada era quien cuidaba de Leonor y Sofía cuando eran pequeñas y sus padres no estaban en casa. La emérita nunca ha tenido esa oportunidad.
Las diferencias han sido siempre más que evidentes. La reina Sofía no está presente en ninguno de los actos de Leonor y Sofía, y no precisamente porque ella no quiera, sino porque se lo prohibe Letizia. El daño irremplazable para ella es que Felipe acate todas las decisiones de su mujer sin rechistar.
La mujer de Juan Carlos le ha pedido a Felipe que intercepte entre ella y Letizia. Le gustaría tener bandera blanca cuando se trate de Leonor y Sofía. Varios medios de comunicación apuntan que Paloma Rocasolano estuvo en la graduación de la princesa de Asturias, aunque no saliese en las fotografías para no generar revuelo, y también estará en la confirmación de la infanta, sitio donde no se ha invitado a la emérita que deseaba ser la madrina de la niña.