Desde que Se Nóos rompió el amor de tanto usarlo e Iñaki Urdangarin le puso los cuernos a su mujer, la infanta Cristina no levanta cabeza. Después de ver las fotos de su marido con otra rubia paseando de la mano, Ainhoa Armentia, que constataban que su matrimonio hacía aguas, todo el mundo habla de qué pasará a partir de ahora con la infanta.
Una portada, la de la revista ¡Hola!, la retrató en el aeropuerto, yendo a ver a papi Juancar a Abu Dhabi, con un rictus serio, triste según la publicación, con una maleta que no le pegaba nada, según Boris Izaguirre, y todavía con el anillo de casada puesto.
Desde que se ha sabido que más pronto que tarde llegará el día que Cristina e Iñaki partirán peras de manera definitiva y se divorciarán, seguro que ahora a la infanta le vienen todos los males y remordimientos de haber estado al lado de él tanto tiempo, haciendo paripés como el del juicio y sus "No me acuerdo".
Desde que se ha sabido que Cristina e Iñaki no tienen pinta que vuelvan a estar juntos, algún medio español ya ha puesto encima de la mesa los nombres de posibles candidatos que podrían volver a ocupar el corazón de la infanta.
Algunos nombres, ciertamente surrealistas y esperpénticos de imaginarlos al lado de la borbona. El diario El Mundo, sin ir más lejos, especulaba con una larga lista, "Candidatos no faltan. Plantéenselo, señoras", les recomendaban a Cristina y a la también soltera hermana suya, la infanta Elena.
En la lista de posibles candidatos había nombres como Bertín Osborne, el presidente del Real Madrid Florentino Pérez o el presentador Joaquín Prat. También empresarios y gente con pasta "y posibles", como el duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart ("está muy solo en el Palacio de Liria") o Luis Gasset (director de Ansorena, "se mueve con aristócratas después de romper con Ágatha Ruiz de la Prada y es un acompañante muy pintón").
Claro está que para pintón, otro de los nombres que han vuelto a escena. Un viejo amigo, alguien del pasado y a quien algún medio le encantaría que hiciera sonreír a Cristina como lo hacía en el pasado. VozPopuli señala a Fernando León, regatista canario establecido en Barcelona, como "una de las ilusiones que hizo a la infanta Cristina instalarse en la Ciudad Condal".
¿Cómo se conocieron? Un misterio, "pues mientras muchos aseguran que fue durante un curso de vela que él impartía, otros apuntan a que les presentó Carlos Morales, también regatista canario, y novio de su prima Alexia. Otra versión señala que la amistad entre rey Felipe VI y Fernando León, con quien preparó los Juegos Olímpicos de 1992, les unió".
Sea como sea, el citado medio lo tiene claro y salta a la vista: "Este atractivo hombre de ojos azules cautivó a la infanta Cristina con la que compartía grupo de amigos y libertad en Barcelona. Aunque esta relación no fue confirmada, muchos dan por cierta esta relación".
En MujerHoy van, más o menos, en la misma línea: "Estaba enamorada de Fernando León, un atractivo regatista canario, hoy cuatro veces olímpico y medalla de oro en Atlanta, en 1996, al que había conocido como profesor en un curso de vela. Ella se integró en su grupo de amigos para pasar desapercibida y poder moverse por Barcelona con libertad".
¿Habrá un revival? Muchos lo querrían, pero el tiempo lo dirá.