Las consecuencias de los estragos que causó la dana en Valencia siguen siendo tema de candente actualidad. Las redes de han inundado de imágenes desoladoras, propias de una película postapocalíptica. Y todo ello acompañado de los dramas personales que encogen el corazón y despiertan las sensibilidades más profundas. Un drama.
Mientras tanto, hay ciertas corrientes que intentan desviar la atención. Por ejemplo, con la visita de los políticos y los reyes Felipe VI y Letizia a la zona cero. Con ello consiguen que se hable más de los motivos que les han llevado allí o de que su visita no era necesaria mientras la verdadera tragedia va quedando enterrada en el olvido.
Objetivo: desviar la atención de lo realmente importante
También están los que lanzan el debate de si LaLiga debería haber suspendido la jornada, consiguiendo el mismo objetivo: que se hable de cosas banales y no de lo que verdaderamente importa: las vidas de la gente.
Por suerte, muchos ciudadanos no se dejan llevar por las manipulaciones externas y buscan la forma de ayudar como pueden, ya sea llevando ropa o comida a centros de recogida, o realizando donaciones anónimas a las instituciones solidarias y ONGs que trabajan sobre el terreno.
El Froilán más ‘solidario’
Aunque esté a unos cuantos miles de kilómetros de España, Froilán, hijo de Jaime de Marichalar y la infanta Elena, tampoco ha perdido de vista los sucesos ocurridos el pasado fin de semana. Y tampoco del paripé de sus tíos en Paiporta, donde una sobreactuada reina Letizia no dejaba de tocarse la cara con el objetivo de que le quedaran restos del barro que tenía en las manos en el rostro y parecer así una persona muy entregada.
Un Froilán que, según nos cuentan, también ha querido dejar de aportar su granito de arena. Y nunca mejor dicho. El sobrino de los reyes de España ha donado 100 euros para los damnificados por el temporal. Teniendo en cuenta que el joven está sin trabajo en Abu Dabi y que solo cobra de la paga de su abuelo, 100 euros son, sin duda, un esfuerzo descomunal. Como buen Borbón que es, no le ha faltado solidaridad. Tiene un buen ejemplo en Juan Carlos I, que durante años no ha dudado en completarle el sueldo a Bárbara Rey, o que en su momento quería solucionarle la vida a Corinna Larsenn. Eso sí que es tener buen corazón.