Como el resto de madrileños, Felipe y Letizia se han tomado un merecido puente en sus labores. Los reyes han cerrado su agenda institucional hasta el próximo sábado 4 de mayo, cuando viajarán a Zaragoza para la jura de bandera del monarca por los 40 años de la Academia General Militar de Zaragoza, donde estudia Leonor. Y con ella se reencontrarán, pero es probable que sea allí, por separado. Desde que Jaime del Burgo rompió su silencio en las redes sociales destapando una supuesta infidelidad de la reina al rey con él durante varios años, los monarcas se han mostrado con otra actitud frente a las cámaras. Más independientes y alejados el uno del otro, la complicidad brilla por su ausencia.
Pilar Eyre aseguraba hace unos meses que el matrimonio de Felipe y Letizia estaría completamente roto desde hace años. Según la periodista, los reyes habrían optado por el cese de la convivencia, nunca por el divorcio porque sería un escándalo para la monarquía. No obstante, ellos, especialmente la reina, que siempre han apostado por una visión moderna, podrían divorciarse en un futuro, cuando la infanta Sofía sea mayor de edad, abril de 2025.
Lo que está claro es que Felipe y Letizia hacen vidas separadas, no hay más que ver sus últimos movimientos. En los últimos fines de semana la reina se ha dejado ver con sus amigas, mientras que el rey se ha ido de fin de semana con los suyos. En estos últimos meses, por lo menos públicamente, el hijo de Juan Carlos se ha dejado ver en Baqueira, Formigal, Medinaceli, Zaragoza, Barcelona, Sevilla, entre otros destinos. A todos ellos solo, sin Letizia. Ya hace meses que se rumorea que podría haber una nueva mujer, aunque son solo habladurías.
Felipe aprovecha los días festivos para verse con sus amigos, ningún plan con Letizia
En los últimos dos meses, Felipe y Letizia solo se han visto juntos en dos ocasiones, una por mes. Casa Real les obliga a dejarse ver juntos compartiendo algún plan para callar algunos rumores de una mala relación entre ellos.
Felipe confesó a los medios de comunicación en septiembre del año pasado que sin Leonor y Sofía la vida en Zarzuela se había vuelto demasiado aburrida. Se las echaba de menos. Los reyes comparten pocas aficiones juntos, tienen gustos muy diferentes, por ello comparten más tiempo con sus amigos.
Estos días festivos Felipe ha sido visto con su amigo Álvaro Fuster y otros más en uno de sus restaurantes favoritos de Madrid. La Guardia Real de Zarzuela es la encargada de hacer la reserva sin decir en ningún momento que se presentará el rey de España, es una sorpresa para los trabajadores del establecimiento. Como siempre entra por la puerta atrás para pasar desapercibido. Y se marcha a altas horas de la madrugada. Los escoltas le vienen a buscar. No tenía prisa debido a que tanto el miércoles como el jueves es festivo en la Comunidad de Madrid, y el viernes 3 puente.