El príncipe Guillermo de Inglaterra y el rey Felipe VI de España, ambos representantes de monarquías con siglos de historia, comparten más similitudes de las que se podría pensar a primera vista. Sin embargo, a pesar de sus roles paralelos como royals europeos y sus vínculos familiares que se remontan a la reina Victoria, la relación entre estos dos líderes reales parece ser sorprendentemente distante.

La razón principal detrás de esta falta de cercanía entre Guillermo y Felipe VI parece radicar en la tensa relación entre sus respectivas esposas, Kate Middleton y Letizia Ortiz. Ambas mujeres, provenientes de familias de clase media, han logrado ascender a posiciones de gran influencia dentro de sus respectivas casas reales. No obstante, sus interacciones públicas han sido notablemente frías, generando especulaciones sobre una posible rivalidad.

Dos estilos, dos enfoques

Kate Middleton, ahora princesa de Gales, se ha ganado el cariño del público británico con su enfoque más tradicional y su dedicación a causas benéficas, siguiendo los pasos de su difunta suegra, la princesa Diana. Por otro lado, Letizia Ortiz ha adoptado un estilo más moderno y directo en su papel como reina de España, rompiendo con ciertos protocolos establecidos. Esta diferencia en sus enfoques y personalidades parece haber creado una barrera invisible entre las dos mujeres, lo que a su vez ha afectado la relación entre sus esposos. Es por este motivo que los encuentros públicos entre Kate y Letizia han sido objeto de intenso escrutinio por parte de los medios, que no han dudado en señalar la aparente falta de química entre ambas.

Escenas controvertidas y rumores persistentes

Un ejemplo claro de esta tensión se evidenció durante la visita de los reyes de España al Reino Unido en 2017. En varias ocasiones, se observó cómo Kate y Letizia evitaban mirarse directamente y tenían interacciones limitadas, a pesar de encontrarse en el mismo lugar. Este comportamiento no pasó desapercibido y alimentó aún más los rumores de una relación distante. Otro incidente controvertido ocurrió en 2019 durante la investidura de Felipe VI como caballero de la Orden de la Jarretera en Windsor, donde se percibió cierta frialdad en el trato entre ambas, especialmente notoria en la postura rígida que mantenían durante el paseo en carruaje compartido, lo que se interpretó como indicio de que a Kate no le simpatiza Letizia.

La falta de una relación cercana entre Guillermo y Felipe VI, influenciada por la tensión entre sus esposas, podría tener implicaciones más allá de lo personal. En un mundo donde la diplomacia real sigue jugando un papel importante en las relaciones internacionales, la ausencia de un vínculo fuerte entre estos futuros monarcas podría afectar la colaboración entre sus respectivos países en el futuro.

Sin embargo, es importante destacar que, a pesar de estas tensiones, ambas casas reales mantienen una relación cordial y respetuosa en el ámbito público. Recientemente, se informó que Felipe y Letizia enviaron sus buenos deseos a Kate Middleton tras su diagnóstico de cáncer, demostrando que, más allá de las diferencias personales, existe un sentido de solidaridad entre las familias reales.