El cisma provocado por Enrique de Sussex en la Casa Real de Inglaterra es un serial de capítulos infinitos. Las memorias del hijo de Carlos III, 'Spare', agitaron un avispero con ganas de pelea. El toma y daca traspasa los muros de palacio, y llega a las redes sociales con elementos realmente sorprendentes. Por ejemplo, la batalla que se está librando a las redes sociales entre los hijos de dos de los personajes más importantes de la historia reciente del Reino Unido. Diana de Gales y John Lennon. El sanctasanctórum de la cultura pop, a pesar de provenir de estamentos y estratos muy diferentes. Sin embargo, la princesa y el músico comparten destino trágico: murieron de manera violenta y el impacto de su fallecimiento conmocionó al mundo entero. Se podría pensar que esta particularidad uniría de alguna manera a los descendientes de ambos VIPS, pero parece que no es así. Y se está liando una buena.
La chispa ha saltado a raíz del chiste de Sean Ono Lennon, el único hijo del fundador de los Beatles con Yoko Ono. El actor y músico nacido en Nueva York (donde asesinarían a su padre 5 años después de su llegada), ha emitido, con año y medio de retraso, su valoración sobre el libro explosivo del royal. La sentencia, fundamentada en un juego de palabras con el título, ha provocado un estruendo brutal. "Spare me", ha dicho Sean, que quiere decir "ahórramelo". Considera la lectura una pérdida de tiempo, vaya, una frase considerada como una ofensa ante las confesiones brutales del príncipe. Lo acusan de falta de empatía y de insensible, pero no es lo peor que le han dicho. Ni mucho menos.
El hijo de los músicos respondía pacientemente a todos aquellos que le recriminaban la publicación de la gracieta, aportando más datos interesantes para evaluar la conexión entre dos sagas tan importantes. Por ejemplo: "En realidad, nos conocemos. Coincidimos en una ocasión. Soy consciente de que tenemos cosas en común. Pero eso fue antes de darme cuenta de que era un idiota". Sean ha ido subiendo el nivel de enfado de los fans de Enrique y Meghan, que hay muchos en los EE.UU. "No tengo nada contra él, solo que la estupidez me molesta" o "empatizo con su sufrimiento, pero si se comporta como un bufón es su problema", sus hits más potentes.
La cosa, por lo que se ve, ha ido desbordándose en el inframundo de la plataforma de Elon Musk, llegando a extremos lamentables: "He recibido 3 o 4 amenazas de muerte por burlarme del título del libro de Enrique y justificarlo porque es un idiota". No se arruga, no, a pesar de la desagradable experiencia de sentirse en la diana de los haters. Se ve que a Sean le va la marcha. Lo lleva en el ADN.