La nueva situación política generará algunos cambios en la familia real. Tras el desastre del PSOE en las elecciones de las CCAA, Pedro Sánchez adelantó las elecciones para el próximo 23 de julio, una fecha que ya ha generado mucho revuelo, precisamente porque se cree que habrá poca participación ciudadana, en esas fechas la mayoría de españoles están de vacaciones. También la Casa Real, que ha tenido que retrasar su descanso. Una vez celebradas las elecciones, el rey deberá reunirse con todos los presidentes de los partidos políticos.
Así que por ahora la única que estará en Palma de Mallorca será la reina Sofía, quien se instalará con su hermana Irene de Grecia en Marivent el próximo 15 de julio. Todos los años acude la familia real para preservar el palacio, ya que fue cedido por el gobierno balear con la única condición que pasasen un tiempo en la isla y promocionasen el turismo. Por ello, Felipe VI participa en la Copa del Rey de vela que se celebra justo la semana siguiente a las elecciones. Es duda su presencia.
Letizia no quiere llevar a Leonor y Sofía a Marivent si está la infanta Elena con sus hijos
Cuando la familia real estaba unida siempre se reunían en Palma de Mallorca unos días en el mes de agosto, era una tradición familiar. Pero desde que los actuales reyes les apartaron a todos de sus funciones, nunca más se ha vuelto a ver una fotografía conjunta a las puertas del palacio.
La infanta Elena y la infanta Cristina acuden con sus hijos, pero intentan no coincidir con Felipe y Letizia. La relación entre el rey y sus hermanas en estos momentos se encuentra en la cuerda floja, le echan en cara que no les hayan ayudado en sus peores momentos.
Letizia siempre llega a la isla más tarde que Felipe. Lo hace en compañía de sus hijas y se resguarda en la masía Son Vent, ya que la reina no quiere que Leonor y Sofía se junten con su familia paterna. Como dijo Victoria Federica en una entrevista, no tiene el más mínimo contacto con sus primas.
La mujer de Felipe no quiere que Leonor se relacione con Victoria Federica y Froilán, son los nietos más polémicos de Juan Carlos I y no son una buena compañía para la futura reina de España. Si los hijos de la infanta Elena van, ellos se quedan en Madrid.