Iñaki Urdangarin cuenta con ansias los días que quedan para el 5 de junio de 2023. Ese día todo cambiará para siempre en la vida del ex deportista. Tendrá la vida solucionada. El todavía marido de la infanta Cristina ha conseguido sacarle a la familia real un pago que se acerca a los dos millones de euros y un sueldo vitalicio con el que no tendrá que trabajar nunca más, a cambio de no abrir la boca y soltar los secretos que conoce de la familia real. Una compensación que recibirá cuando se separe de Cristiina, y eso ocurrirá el próximo 5 de junio, cuando la hija pequeña de los dos será mayor de edad.

Una serie de secretos que Iñaki había escrito en unas memorias mientras estuvo en prisión, y por el que le habían ofrecido una suculenta cantidad de dinero para publicarlas. Sin embargo, ha conseguido sacarle más a Cristina y a su padre, el rey emérito Juan Carlos I, que es quien correrá con los gastos.

Proposiciones indecentes a diario para Iñaki Urdangarin

Pero escribir esas memorias no fue lo único que hizo Urdangarin mientras estuvo preso. Según Pilar Eyre, estuvo lidiando con las proposiciones indecentes que le hacían algunas de las reclusas.

Urdangarin sale de la cárcel EFE

Cuando Urdangarin fue condenado cinco años y diez meses por el Caso Nóos en 2018 fue enviado a la prisión de Brieva (Ávila). Se trata de una cárcel femenina en la que Iñaki cumplía pena aislado. Aun así, no era invisible para las reclusas, que aprovechaban la mínima para lanzarle propuestas de cama a diario.

Urdangarin arrasaba entre las presas de la cárcel de Brieva

Cuenta la periodista especializada en la casa real que no pasaban desapercibidos “los vis a vis que el cuñado de Felipe VI  “mantenía con su esposa, la infanta Cristina. Y que cuando podían le decían cosas del estilo "Cristina, f... bien, que si no lo haremos nosotras, ¡qué estamos muy cachondas y él está muy bueno!" o "¡Déjalo a gusto, exprímele, que si no aquí estamos nosotras para f..., que pasamos mucha hambre!".

Y no solo eso. “Las presas de Brieva han ido poniendo al exduque una serie de motes que, gracias a las palabras de la periodista, ahora son conocidos por todos. Así, Iñaki Urdangarin es conocido en la cárcel como el ‘pibón de Brieva’, el ‘chorbo de Cristina’, ‘tiarrón del norte’ o ‘chuletón vasco’", va publicar Eyre.