El divorcio entre Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin podría ser denominado como una "historia interminable". A pesar de dos años de negociaciones legales con sus respectivos abogados, la pareja aún no ha alcanzado un acuerdo de divorcio mutuamente satisfactorio. Esta prolongada disputa legal ha llevado a especulaciones erróneas, como la afirmación de Juan Luis Galiacho de que la infanta había cedido a las elevadas demandas de su exduque de Palma. Sin embargo, la realidad es diferente.
Urdangarin recibió un millón de euros como compensación por renunciar a escribir un libro que le ofrecieron. El segundo millón estaba vinculado a la firma del divorcio, ya sea en un solo pago o de manera fraccionada, pero hasta ahora esto no ha sucedido. Además, se informa que su salario ha aumentado de los 6,000 euros mensuales acordados durante la separación, según las capitulaciones matrimoniales, a 25,000 euros en el nuevo acuerdo de divorcio. A pesar de la situación, Urdangarin aún mantiene su escolta.
La infanta Cristina ha impuesto una nueva cláusula que ha sorprendido a Iñaki Urdangarin y que no está dispuesto a aceptar. Ella quiere comprobar que su todavía marido está enamorado de Ainhoa Armentia. Piensa que lo único que quiere es el dinero de los Borbón y se aprovecha de la situación. Le guarda mucho rencor y por este motivo no piensa ponerle las cosas fáciles.
Juan Carlos se reúne con Iñaki Urdangarin en Vitoria
Juan Carlos I ejerce presión para que la infanta Cristina ceda y se olvide del divorcio. El emérito se hacía totalmente cargo de todos los gastos. Él pagaría a Iñaki Urdangarin millones de euros por su silencio. Casa Real también tiene mucho miedo y quiere que se acabe con esto.
El emérito viajó el pasado lunes de Londres a Sanxenxo, pero hizo una parada técnica en Vitoria para una revisión médica. Sin embargo, lo que nadie sabe es que también aprovechó para reunirse con Iñaki Urdangarin y hablar de los términos del divorcio. Una cita que se ha llevado a cabo en la más estricta privacidad. Entre el exduque de Palma y el padre de Felipe empiezan a saltar chispas.