La historia de Iñaki Urdangarin y su divorcio de la infanta Cristina es conocida por muchos, pero detrás de la versión oficial de su pensión mensual de 5.000 euros, se esconde una verdad mucho más turbia. Según reportes de Juan Luis Galiacho y otras fuentes, Urdangarin exigió dos millones de euros y una pensión vitalicia que oscilaría entre los 25.000 y 50.000 euros mensuales. Este dinero no era simplemente por despecho o resentimiento; era el precio de su silencio sobre secretos oscuros de la familia real, especialmente sobre los hijos ilegítimos atribuidos al rey emérito Juan Carlos I y a Felipe VI.
Durante su tiempo en la cárcel de Brieva, cumpliendo condena por el caso Nóos, Urdangarin escribió unas memorias que contenían información comprometida sobre estos temas. El acuerdo financiero buscaba asegurarse de que esos secretos permanecieran guardados y que Urdangarin no hablara públicamente de cuestiones que resultan extremadamente incómodas para la monarquía. Entre estos secretos, uno de los más delicados era la lista de hijos ilegítimos de Juan Carlos I y posiblemente también de Felipe VI.
Larga lista de presuntos hijos ilegítimos para Juan Carlos I
Uno de los casos más conocidos es el de Albert Solà, quien falleció repentinamente a los 66 años justo antes de una entrevista en televisión donde planeaba hablar sobre su supuesto vínculo con Juan Carlos I. Solà afirmaba tener una prueba de paternidad con un 99% de coincidencia con el exmonarca y había presentado una demanda para ser reconocido como su hijo, aunque el Tribunal Supremo desestimó su caso en 2015.
Otra figura destacada es Ingrid Sartiau, que también sostiene ser hija de Juan Carlos I. A pesar de sus esfuerzos legales, no ha logrado reconocimiento oficial, pero continúa compartiendo su convicción y comparando su parecido con Felipe VI en redes sociales.
María Alexandra es otra mujer que asegura ser hija del exmonarca. Sus intentos por demostrar su filiación han enfrentado numerosos obstáculos legales, sin haber logrado todavía el reconocimiento oficial.
El caso más reciente es el de Alejandra, supuesta hija ilegítima del rey emérito, cuya existencia fue mencionada por primera vez en 2017 por Pilar Eyre y luego por los periodistas José María Olmo y David Fernández en su libro "King Corp. El imperio nunca contado de Juan Carlos". Según los autores, todos los miembros del palacio de Zarzuela, incluido Felipe VI, conocen a Alejandra, fruto de una relación de Juan Carlos I con una aristócrata en los años 70. Sin embargo, Alejandra nunca ha reclamado derechos sucesorios.
Felipe VI, por su parte, no tiene la fama de mujeriego de su padre, pero se rumorea que podría tener una hija secreta anterior a su matrimonio con Letizia. Antes de conocer a la actual reina, Felipe tuvo relaciones con varias mujeres, incluyendo a Isabel Sartorius, Eva Sannum y Gigi Howard.
A Felipe también le atribuyeron una hija ilegítima
La relación más destacada de Felipe fue con Isabel Sartorius, comenzando en 1989. Su relación atrajo mucha atención mediática y, tras su ruptura en 1991, se especuló que Sartorius podría estar embarazada de Felipe. Según Pilar Eyre, la madrastra de Isabel llamó a Sofía: "Isabel está embarazada, tenemos un problema", le dijo.
Eso sí: Sofía, su íntima amiga, fue tajante en la respuesta: 'Perdona, vosotros tenéis un problema, nosotros no’". Isabel finalmente atribuyó la paternidad de su hija Mencía a Javier Soto, su pareja de entonces. No obstante, rumores persistieron sobre el parecido de Mencía con Felipe VI.