La familia Borbón siempre ha proyectado la imagen de una relación cercana y armoniosa, pero detrás de esta fachada, la realidad era muy distinta. Un ejemplo claro es la relación entre Felipe y Letizia, la cual ha sido objeto de especulaciones y rumores a lo largo del tiempo. Sin embargo, el aparente distanciamiento y las tensiones no solo se limitan a ellos; las relaciones de las infantas Elena y Cristina con sus respectivos esposos, Jaime de Marichalar e Iñaki Urdangarin, también han sido motivo de controversia y eventual fracaso. A pesar de la cercanía que alguna vez existió entre los cuñados, con el tiempo, se fueron alejando hasta el punto de casi no tener contacto.

A lo largo de los años, tanto Jaime de Marichalar como Iñaki Urdangarin han estado bajo el escrutinio público debido a su conexión con la familia Borbón. No obstante, han manejado su exposición mediática de maneras muy diferentes. Mientras que Jaime ha optado por mantenerse en un perfil bajo, evitando las cámaras y la atención pública en la medida de lo posible, Iñaki parece no tener problemas en estar en el centro de la atención, siendo un rostro recurrente en las portadas de las revistas del corazón.

Jaime de Marichalar boda Urquijo GTRES

Jaime de Marichalar fue el primero en unirse al clan Borbón cuando se casó con la infanta Elena en 1995. Tres años después, en 1998, Iñaki Urdangarin oficializó su relación con la infanta Cristina. Aunque Jaime pertenecía a la aristocracia y tenía una vida acomodada, y Iñaki provenía de un entorno más sencillo como jugador de balonmano, ninguno de los dos tenía un vínculo directo con la realeza, lo cual no era del agrado de Juan Carlos. A pesar de estas diferencias de origen, se esperaba que ambos se apoyaran mutuamente en su nueva vida dentro de la familia real, enfrentando juntos los desafíos que venían con el protocolo, los privilegios y las responsabilidades de su nuevo estatus. Ambos eran también empresarios exitosos y compartían un origen geográfico similar, siendo del norte de España: Iñaki del País Vasco y Jaime de Navarra.

Mala relación entre Iñaki Urdangarin y Jaime de Marichalar 

Las infantas Cristina y Elena confiaban en que sus maridos, Jaime e Iñaki, desarrollarían una relación de camaradería y apoyo mutuo. Sin embargo, esta expectativa nunca se materializó. La relación entre ellos fue siempre distante, limitándose a saludos cordiales durante los encuentros familiares. Además, la salida temprana de Jaime de la familia real acentuó aún más esta distancia. Según información de EDATV, la relación entre los exduques estuvo marcada por los celos y la competencia.

Jaime de Marichalar nunca logró ganarse el apoyo popular. Su carácter reservado y su actitud distante hicieron que muchos lo percibieran como alguien interesado en acercarse a la corona solo para beneficiarse de su estatus. En contraste, Iñaki Urdangarin, conocido inicialmente por su carrera en el balonmano, se ganó rápidamente la simpatía del público. Cuando Iñaki comenzó a destacar, las críticas hacia Jaime se intensificaron. Urdangarin se presentó ante la opinión pública como un "príncipe azul": atractivo, carismático y cercano, lo que le valió el favor de Juan Carlos, convirtiéndose en su yerno preferido, una situación que Jaime jamás aceptó con agrado.

Iñaki Urdangarin