Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina rompieron su relación hace algo más de tres años. Decidieron separarse tras dos décadas de matrimonio y cuatro hijos en común. El motivo de la ruptura fue una infidelidad, supuestamente, porque todos saben que la relación no pasaba por su mejor momento. El exjugador de balonmano tenía claro que se separaría de la hija de Juan Carlos I cuando ingresó en prisión. Culpa a los Borbón de todos los males, y es que al final le utilizaron como un peón para demostrar que la justicia es igual para todos.
El exjugador de balonmano ya no mantenía una relación con Cristina. Las visitas a la cárcel de la hermana de Felipe VI desaparecieron, y cuando salió tampoco le visitó, se quedó en Ginebra y él en Vitoria. Iñaki Urdangarin solo quería dinero. Recibió dos millones de euros en concepto de indemnización por un libro que le ofrecieron escribir y al que renunció por su silencio. También recibiría 25.000 euros mensuales de por vida. Es Juan Carlos I quien se encarga de todos esos pagos. La infanta Cristina continuaría financiándole su vida de millonario cuando falleciese el emérito. Las transacciones se realizan en Suiza para evitar a la Hacienda Pública.
Iñaki Urdangarin vive como un millonario con solo 900 euros mensuales
Iñaki Urdangarin negó que cobrase las mencionadas cantidades. Aseguró que solo vivía de una prestación de 900 euros por haber estado en prisión, como forma de reinserción. Sin embargo, hay muchas personas que no entienden el alto nivel de vida del exduque de Palma si solo cobrase esos 900 euros mensuales, ya que curiosamente Ainhoa Armentia también ha dejado su trabajo en el bufete de abogados en el que conoció a Iñaki. Ninguno de los dos trabaja en la actualidad.
Ainhoa Armentia e Iñaki Urdangarin viven como millonarios. Botellas de champagne de 2.000 euros, restaurantes de estrella Michelin, hoteles de cinco estrellas gran lujo y viajes constantes para ver a alguno de sus hijos o simplemente por veranear.
Además, hace unos meses se instalaron definitivamente en la urbanización Ciudad Jardín, en Vitoria, donde también vive la madre de Iñaki en otra vivienda. Se trata de una casa en una de las urbanizaciones más lujosas y con todas las comodidades.
Iñaki es un gran deportista. Sale en bici todos los días, pero también juega a pádel y tenis. Los vecinos del exjugador aseguran que la infanta Cristina le mantiene y se está aprovechando de la familia Borbón.
