La ruptura entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina ha sido objeto de especulación durante mucho tiempo. Aunque finalmente firmaron el acuerdo de divorcio en enero, el proceso ha estado marcado por la reticencia de la infanta Cristina a firmar los papeles. A pesar de saber que Iñaki le había sido infiel y la había humillado delante de toda España, no quería separarse de él. Según numerosas fuentes, seguía enamorada, e incluso estaba dispuesta a perdonarlo todo si volvía a su lado. Una infidelidad, la de Iñaki, que solo ha sido la última de tantas otras.
La relación entre Iñaki y Cristina no empezó de manera tradicional. Cuando Urdangarin conoció a la infanta, él mantenía una relación sentimental con Carmen Camí, una mujer a la que también conocería Cristina. Iñaki no rompió con Camí hasta asegurarse de que se casaría con Cristina y se integraría en la familia Borbón.
Iñaki Urdangarin, promiscuidad sin remordimientos
Una historia de amor que, según El Mundo, revivió años después. Iñaki no tuvo reparos en tener affaires con una mujer casada y con hijos, y tampoco que fuera unaamiga de la pareja. "Empezaron un noviazgo que duró unos pocos meses y que revivieron años más tarde, ya casados, tal y como ha sabido LOC. Entre 2002 y 2003, el duque de Palma mantuvo una relación sentimental con esta mujer, casada con uno de sus mejores amigos, madre de dos hijos y funcionaria".
Pero aquí no se quedan las infidelidades del ex duque de Palma. Parece ser que Urdangarin apuntaba a todo lo que se movía, incluso a flirteaba con otras madres del colegio al que iban sus hijos. Según la experta Maica Vasco, esta actitud es la que tuvo cuando conoció a Ainhoa Armentia, a la que se “calzó” con tan solo conocerla cuando coincidieron en el bufet de abogados en el que trabajó Iñaki tras cumplir la condena por el caso Nóos. En este sentido, Maica Vasco hace referencia a la promiscuidad habitual de Iñaki, que recurría a su cuerpo para seducir toda mujer que le pasaba por delante, a los cuernos que siempre ha llevado Cristina y al apodo de ‘Duque empalmado’ que algunos medios le pusieron por ser un hombre promiscuo.
Una actitud infiel que llevó al entorno de la infanta a recomendarle insistentemente que se divorciara. Sin embargo, como decíamos, la infanta siempre rechazó la idea. Quería tener a su lado a Iñaki a cualquier coste. Algo que a Vasco le hace mucha gracia: “La historia de la infanta Cristina, la gran cuernuda de España, con Iñaki Urdangarin da para escribir El Quijote. Es para llevarla al cine e ir con orinal, porque da la risa”, señala la comunicadora.