Desfile de familiares de Iñaki Urdangarin por la cárcel de Brieva. El exduque de Palma está viviendo su primer mes encarcelado, recluido totalmente solo en un módulo de 450 m² para él solito. Toda una pesadilla que estaría pasando con algunas distracciones, como la televisión de la que dispone en una pequeña salita, un gimnasio y varios servicios religiosos: unas comodidades que le harían un poco más soportable este mal trago. Ahora bien, son las visitas lo que más le ayudarían a volver a sonreír.

La primera en ir a verle fue su mujer, la infanta Cristina, que habría utilizado el parking del personal para entrar sigilosamente y no llamar la atención de los fotógrafos. Unos privilegios que han hecho enfadar a muchos, pero de los que también se ha aprovechado la madre, una devastada Claire.

Las hermanas del vasco también se han acercado para saludarlo, intentando animarle en estos momentos tan duros. La diferencia ha sido, por eso, que ellas no tuvieron ningún problema en posar ante los fotógrafos, llegando a la prisión con sus maridos sin esconderse.

Y de ellas, a recibir la primera visita de uno de sus hijos. Separarse de los cuatro pequeños Urdangarin-Borbón tiene que ser una de las cosas más difíciles, esperando como agua de mayo poder volver a verles. Pues bien, Juan Valentín, el primogénito del matrimonio, ha sido el primero en ir a visitar al padre.

GTRES

Así lo asegura la revista Semana, afirmando que habría ido el viernes 6 de julio a solas. Sin ningún familiar acompañándolo, el joven de 18 años entró en la sala de visitas al lado de los miembros de su equipo de seguridad. Dan por hecho que entró al centro por la puerta principal y no por el parking, con lo que podría salir a la luz alguna fotografía. Mientras tanto, sin embargo, sólo nos podemos quedar con el testimonio del medio: explicando que estuvo en el interior una hora y cuarto. ¿Cómo lo vio?

Además, siguen diciendo que es probable que este domingo veamos a la Infanta visitando a Iñaki de nuevo. ¿Tendremos fotografías?