Iñaki Urdangarin está más ansioso que nunca por firmar los papeles del divorcio con la infanta Cristina. Lleva meses esperando que su todavía esposa ponga la rúbrica final en la separación definitiva. Querían hacerlo discretamente en un notario para evitar filtraciones en un juzgado, algo que podían hacer desde que la hija pequeña de la familia, Irene, cumplió 18 años el pasado 5 de junio. Pero han pasado ya más de siete meses desde entonces no hay noticias. Parece que la infanta no está por la labor.
Dicen las lenguas que la infanta Cristina quiere retrasar el divorcio para que Iñaki no pueda empezar su vida normal con su nueva novia, Ainhoa Armentia. Estas mismas fuentes aseguran que Cristina todavía tiene el corazón latiendo por Iñaki. Mientras que otros dicen que no quiere aceptar las condiciones que él ha puesto porque considera que es una humillación. Al fin y al cabo, la infanta fue la única que le echó una mano cuando Iñaki cumplía pena de prisión por el caso Nóos. Pagarle después de semejante traición no le hace ninguna gracia.
Iñaki Urdangarin ya habría cobrado un millón de euros de los dos que le pide a la infanta Cristina en el divorcio
En cuanto a lo que estaría pidiendo Urdangarin, algunos medios afirman que ha exigido un pago de dos millones de euros y una pensión vitalicia de 25.000 euros. Pero hay quien dice que eso es solo la punta del iceberg. Según El Cierre Digital, podría estar hablando de 50.000 euros al mes, 45.000 de los cuales llegarían a través de cuentas opacas en el extranjero.

Mientras tanto, según Monarquía Confidencial, Iñaki ya habría recibido una parte de esos dos millones de euros. Una buena suma que, dicen, le ha permitido a Urdangarin y Ainhoa empezar su nueva vida de ricos en Vitoria. Eso sí, el resto del pastel lo cobra cuando los papeles estén firmados.
La pregunta ahora es cuándo la infanta Cristina estampará su firma en los papeles. En noviembre se dijo que sería inminente. Hasta la infanta Elena lo confirmó en una conversación en la que pensaba que nadie escuchaba. Mientras que otras fuentes apuntaron a después de las fiestas navideñas. Sin embargo, lo único cierto es que han pasado ya dos años desde que salieron a la luz las imágenes de Iñaki paseando con Ainhoa junto a la playa, y de momento sigue casado con Cristina.