Iñaki Urdangarin vuelve a ser el enemigo número uno de Zarzuela. El exjugador de balonmano sabe demasiadas cosas y piensa recuperar su imagen a cambio de su silencio. El próximo mes de julio, cuando Irene Urdangarin cumpla la mayoría de edad, firmará el divorcio con la infanta Cristina, dejará de pertenecer a la familia real. La hermana de Felipe VI ha estado asesorada en todo momento por Juan Carlos I, quien tiene relación con el exduque de Palma y le ha garantizado un divorcio con el que podrá estar seguro hasta el fin de sus días.
El padre de Juan, Miguel, Pablo e Irene recibirá una pensión de 25.000 euros al mes, aunque ya se habla de 10.000 euros, una indemnización compensatoria de dos millones de euros, dinero que le ofrecieron por la publicación de un libro con sus memorias, y se le regalarán algunas propiedades de la costa francesa, como Bidart. Además, se cumplirá con sus deseos de mantener su escolta y se le financiarán los viajes que estén relacionados con sus hijos.
Iñaki Urdangarin quiere mejorar su dañada imagen y encontrar un trabajo en el que estar seguro y bien, no obstante con el dinero que percibiría de la infanta Cristina no le haría falta. Juan Carlos I es quien ayudará a su hija a sufragar estos gastos imprevistos. Es importante mantener a Iñaki contento. El guipuzcoano fue el único implicado en el caso Nóos de Casa Real, pero tanto el emérito, como Felipe, incluso la infanta Cristina eran conocedores de todo el entramado. Tuvo que sacrificarse para no implicar al resto, y este es su agradecimiento.
Iñaki Urdangarin tiene mucha información en su poder que podría acabar con Casa Real
El exduque de Palma ha mantenido una gran amistad con Juan Carlos I, de hecho aún guardan el contacto. Sabe muchos trapos sucios del emérito que podría sacar a la luz, también de su mujer o incluso de Felipe VI. Al final era una persona de confianza. Casa Real podría irse a la ruina si abriese la boca, y no está dispuesto a callarse si no queda contento. El exjugador de balonmano sabía perfectamente todo sobre los hijos ilegítimos de Juan Carlos. Por todos es conocida su fama de mujeriego, alguna vez tuvo que encubrirle antes sus hijas o su mujer. En la familia todos eran conocedores de la existencia de Alejandra de Rojas, una de las hijas ilegítimas de Juan Carlos fruto de su relación con un aristócrata. Por supuesto, esta vivencia y otras, como la presencia de Albert Solá o Ingrid, habrían salido en las memorias que estaba preparando Iñaki.
Iñaki Urdangarin quiere vivir como una persona anónima al lado de Ainhoa Armentia. Olvidarse para siempre de Casa Real y quedarse en un segundo y discreto plano.