Giro inesperado de los acontecimientos en el divorcio entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. Según apuntan desde Monarquía Confidencial, la hija del rey Juan Carlos I, no está dispuesta a aceptar las condiciones que exige Urdangarin.
La infanta e Iñaki anunciaron su separación el pasado 24 de enero de 2022. Hacía cinco días que habían salido a la luz unas imágenes de Iñaki paseando por la playa con Ainhoa Armentia, la nueva pareja del ex jugador de balonmano. Y desde entonces, Cristina y Urdangarin están negociando las condiciones de su divorcio.
Iñaki Urdangarin quiere solucionar su vida con el divorcio de la infanta Cristina
En este sentido, según informó Juan Luis Galiacho y confirmaron varios medios, Urdangarin ha pedido dos millones de euros y un sueldo vitalicio de 25.000 euros al mes a cambio de guardar silencio. Al parecer, Iñaki recogió muchos de los numerosos secretos de la familia real y de algunos amigos poderosos del rey emérito Juan Carlos I en unas memorias que escribió mientras estuvo en la cárcel de Brieva. Un relato por el que recibió una oferta millonaria. De ahí las exigencias a la infanta. Sus peticiones serían a cambio de guardar silencio.
Y eso no es todo. El todavía yerno del emérito solicitó disponer de las casas de Bidart y de Baqueira, así como de un servicio de seguridad privada las 24 horas.
Un acuerdo que se esperaba que estuviera finiquitado por después del pasado 5 de junio. Aquel día Irene, la hija pequeña de la familia, cumplió 18 años, a partir de lo cual Cristina e Iñaki podían formalizar su divorcio en un notario, evitando para por los tribunales y las posibles filtraciones que se pudieran derivar.
Sin embargo, ha pasado ya casi un mes y medio desde entonces y no hay novedades. Desde ElNacional te contábamos recientemente que todo apuntaba a que la firma de las partes no se daría hasta después del verano. La infanta no tiene ninguna prisa.
Giro de 180º: Cristina no quiere pagar la fiesta a Iñaki y Ainhoa
Sin embargo, en Monarquía Confidencial van un paso más allá. Apunta el medio que Cristina no está dispuesta a aceptar las condiciones que reclama su todavía marido. “Sufragar la escolta y la residencia donde se establezca con Ainhoa Armentia es algo a lo que no está dispuesta Cristina”, escribe el medio. Además, habrían hablado con una fuente cercana a la pareja: “Ella no tiene que mantener nadie. Se van a separar, que cada uno siga su vida como mejor pueda”.
Asimismo, tampoco podemos obviar que Juan Carlos, por su parte, habría recomendado a la infanta que acepte las condiciones y que él paga la cuenta. Es el primer interesado en silenciar a Iñaki. Sin embargo, aunque el emérito pague ahora, será Cristina quien tendrá que hacerse cargo de la pensión de Iñaki cuando el ex monarca muera. Y no está dispuesta a hipotecarse de por vida por 25.000 euros al mes. Y menos si es para pagarle la fiesta con su nueva pareja, Ainhoa Armentia.