Iñaki Urdangarin está dando demasiados quebraderos de cabeza a la corona. El exduque de Palma ingresó en prisión por el caso Nóos, aunque no hubiese sido el único implicado, pero Juan Carlos I le pidió que callase y aceptase su condena para no perjudicar a la corona, ese precio tan alto que pagaría se le compensaría a su salida. El exjugador de balonmano aceptó el trato. Recibió la libertad condicional en 2022 y empezó a trabajar en un bufete de abogados, en el que trabajaba Ainhoa Armentia.
La infanta Cristina apostó por Iñaki Urdangarin y sacrificó a su familia. No quería dejar a sus hijos huérfanos de padre. Sin embargo, las visitas de la madre de sus hijos se redujeron con el paso del tiempo hasta el punto de desaparecer por completo. Cuando salió de prisión ni tan siquiera le hizo una visita. Parece que la relación ya estaba muerta. Por este motivo, el exjugador no habría engañado a la madre de sus hijos.
Iñaki Urdangarin chantajea a Juan Carlos I y a la infanta Cristina
Iñaki Urdangarin aprovechó la separación con Cristina para chantajear a Juan Carlos I. Una vez que se divorciase de la madre de sus hijos ya nada le ataría a la corona. El exduque de Palma ya pagó su deuda con la justicia y no tiene miedo a romper su silencio y culpar a las partes que en aquel momento salieron exculpadas. Podría crear un auténtico terremoto en Zarzuela. Por este motivo, el emérito negoció con él.
El exduque esperaba que Juan Carlos I cumpliese con la promesa que le hizo en su momento. Iba a vivir como un rey gracias a su sacrifico. Según Juan Luis Galiacho, Iñaki Urdangarin recibió dos millones de euros en concepto de indemnización por un libro que le ofrecieron escribir y al que renunció, además de 25.000 euros mensuales de por vida. El emérito es quien abona esta cantidad todos los meses a través de transacciones desde Suiza para evitar a la Hacienda Pública. Sin embargo, Iñaki se aprovecha de la ocasión y habría pedido más dinero. Ahora se habla de unos 50.000 euros anuales, una cantidad que una vez fallezca el marido de la reina Sofía será la infanta Cristina quien tenga que hacerse cargo de ella, y no llegaría con su sueldo de 400.000 euros anuales, porque serían 600.000 euros anuales.
Por esta razón, a Iñaki Urdangarin no le hace falta buscar ningún trabajo. De hecho, ha rechazado ofertas por 200.000 euros, y es que no tiene necesidad. Gana una suculenta cantidad por el mínimo esfuerzo.
Iñaki Urdangarin recibió una oferta laboral por parte de una de las amantes de Juan Carlos I, Corinna Larsen. 200.000 euros anuales por fortalecer la vertiente comercial de la Fundación Laureus. Incluso en algunos eventos podía ganar 50.000 euros más. Según él, esta cifra era irrisoria para mantener su alto nivel de vida.
