A principios de año, Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina decidieron poner fin a su matrimonio tras dos años de una batalla legal interminable. Sin comunicado oficial, la noticia se difundió en todos los medios de comunicación, y marcó el cierre de la historia. Este conflicto concluyó con un acuerdo que, según el periodista Juan Luis Galiacho, favoreció más al exduque de Palma, Iñaki Urdangarin. El acuerdo no fue sencillo y contenía ciertas condiciones específicas que se han ido revelando con el tiempo.
Galiacho, director de ‘El Cierre Digital’, explicó que Urdangarin había recibido una propuesta para escribir un libro, por la cual obtendría una compensación de dos millones de euros de parte de una editorial de renombre. Sin embargo, aunque este proyecto fue aprobado, Urdangarin decidió finalmente renunciar a él. A pesar de esta renuncia, el acuerdo incluyó que Urdangarin recibiera una asignación mensual vitalicia de 25,000 euros, gestionada por el rey emérito, Juan Carlos I, independientemente de si está presente o no. Cabe recordar que Urdangarin fue encarcelado a raíz de los escándalos en los que estuvo involucrado el rey emérito. En su momento, advirtió que esta situación podría tener consecuencias. Este proceso judicial fue, además, un símbolo de que la justicia debía ser aplicada por igual a todos, un esfuerzo por calmar el malestar social que reinaba en esos años.
El acuerdo económico entre la infanta Cristina y Urdangarin se llevó a cabo en Ginebra, aunque el trámite de divorcio propiamente dicho se formalizó en Barcelona. Sin embargo, la infanta incluyó en el acuerdo ciertas cláusulas con el objetivo de dificultar la relación de Urdangarin con su nueva pareja, Ainhoa Armentia. Una de las condiciones más destacadas era que, si Urdangarin hablaba con los medios de comunicación sobre su relación o el acuerdo, perdería todos los beneficios estipulados. De hecho, ya recibió una advertencia tras conceder una entrevista a la revista ‘Semana’.
Iñaki Urdangarin cobraría miles de euros mensuales desde Suiza
En esa entrevista, Urdangarin comentó: "Estoy divorciado, ya no tengo ninguna condena", confirmando públicamente su separación de la infanta Cristina. No obstante, la periodista Maica Vasco refutó esta declaración, afirmando que el trámite realizado en Barcelona no era más que un simple procedimiento. Según Vasco, el verdadero acuerdo económico se firmó en Ginebra, y sugirió que todo el proceso fue diseñado para que Urdangarin pudiera irse sin recibir oficialmente ninguna compensación económica, una versión que la periodista consideró poco creíble.
Vasco también argumentó que este procedimiento podría haber sido una estrategia para encubrir que Juan Carlos I había entregado a Urdangarin una suma considerable de dinero a cambio de su silencio, evitando así cuestionamientos sobre el origen de estos fondos. En un video publicado en su canal de YouTube, titulado "Iñaki Urdangarin: excuñado de Felipe VI: Jaque mate a la monarquía española", Vasco subrayó que toda esta situación parecía ser un montaje para ocultar la verdad.
Según el contrato de divorcio firmado en Barcelona, Urdangarin se marcha "sin indemnización y sin pensión". Mientras sus hijos no se independicen económicamente, tanto él como la infanta Cristina deberán cubrir sus gastos, en proporción a lo que cada uno gane. No obstante, Vasco puso en duda este acuerdo, afirmando que era difícil de creer dado el lujoso estilo de vida de Urdangarin, quien parece "vivir como un rey". Aunque se firmó un contrato regulador en Barcelona, lo esencial del acuerdo se habría pactado en Suiza, concluyendo que Urdangarin solo debía "vivir bien y mantenerse en silencio".