Iñaki Urdangarin todavía no ha firmado el acuerdo de divorcio con la infanta Cristina por cuestiones económicas. El todavía matrimonio no llega a un acuerdo que satisfaga a ambas partes. El exduque de Palma quiere vengarse de Casa Real, especialmente de Juan Carlos I a quien culpa de todos los males. La familia del exjugador de balonmano piensa exactamente igual. Iñaki podría haberse salvado de la cárcel si el emérito hubiese querido. El marido de Sofía era conocedor de todo el entramado y sabía que se les estaba espiando. La corona estaba en peligro y no le quedó más remedio que sacrificar un peón. Salvó a la infanta Cristina porque hubiese sido una deshonra para la monarquía española a nivel internacional, pero con Iñaki demostró a los ciudadanos que la justicia es igual para todos.

Iñaki y Ainhoa restaurante
Iñaki y Ainhoa restaurante

El exduque de Palma pide 25.000 euros mensuales, dos millones de euros en concepto de indemnización por aquel libro que le ofrecieron publicar y renunció, varias propiedades en la costa francesa, mantener sus escoltas para garantizar su seguridad y financiar todos los viajes relacionados con sus hijos. Es decir, vivir como un rey. Sin embargo, la infanta Cristina no está dispuesta a ceder. Al fin y al cabo es ella la mujer humillada, traicionada y engañada. La hija de Juan Carlos sacrificó la corona y su familia por amor, apostó por Iñaki y se lo paga con una infidelidad. Urdangarin tenía pensado mantener una relación con Ainhoa Armentia y con Cristina a la vez si no le hubiesen fotografiado.

Iñaki Urdangarin vive a cuerpo de rey gracias a la infanta Cristina 

Ainhoa Armentia e Iñaki Urdangarin están muy felices juntos. Parecen dos adolescentes. No les importa darse apasionados besos en medio de la calle aunque puedan existir miradas indiscretas. Ahora todo el mundo tiene un teléfono móvil y es muy sencillo encontrar alguna fotografía de ambos. Se les ha podido ver en Palma de Mallorca, Altea o Baqueira. La pareja, que piensa casarse en un futuro no muy lejano para formalizar la relación, disfruta de la vida y viven muy bien. No se privan de nada. El exduque visita los mejores hoteles y restaurantes y se pide lo más caro de la carta.

Este verano Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia se escaparan por Europa, se desconoce el destino, pero algunas personas cercanas a la pareja hablan de la Costa Azul, en Francia, un destino que ya han visitado en otra ocasión. Cuando salen no se privan de nada. Cenas de estrella Michelin, hoteles de cinco estrellas o yates privados, máxima comodidad, aunque cuando salen fuera de Europa no tienen escoltas.

Ainhoa e Iñaki
Ainhoa e Iñaki