Iñaki Urdangarin aún tiene un nexo de unión con la infanta Cristina. El exjugador de balonmano se divorció hace tres años de la hija de Juan Carlos I, pero tras más de dos décadas de relación siempre tendrán cuatro hijos en común. Juan, Pablo, Miguel e Irene. Durante el proceso de divorcio, el exduque de Palma se distanció de sus hijos por la hija de Juan Carlos I. La hermana de Felipe VI no quería que sus cuatro hijos conociesen a Ainhoa Armentia, le hacía mucho daño. Ahora que el tiempo ha puesto todo en su sitio las cosas han cambiado y por primera vez pudieron celebrar la Navidad todos juntos.
No obstante, Iñaki Urdangarin no logra cerrar heridas con Irene Urdangarin y reconciliarse. La relación con su hija es nefasta. El exjugador ha intentado absolutamente todo, pero la benjamina de la familia se cierra en banda. Era menor de edad cuando sus padres se separaron y vivía con la infanta Cristina. Vio su sufrimiento en primera persona y no le perdona que haya engañado a su madre, lo ha visto siempre como de un hombre cobarde. No se traiciona a una persona cuando has dejado de quererla, las cosas primero se hablan antes de engañar a nadie. Así piensa Irene. Su padre le ha decepcionado, y ha visto a Ainhoa Armentia como la mala de la película. Siempre hay una madrastra.
Irene Urdangarin, descontrolada en Londres, Iñaki Urdangarin interviene y acaba peor que mal
Tras el divorcio de sus padres Irene Urdangarin se ha vuelto muy rebelde. Ha cumplido la mayoría de edad y hace prácticamente lo que le da la gana. Vive en Reino Unido con Juan y Miguel, y sale de fiesta todos los días. Estudia Organización de eventos en la universidad de Oxford, pero no está satisfecha con sus estudios. Ha pensado en dejarlo, simplemente porque su intención es instalarse en Madrid con Juan Urquijo, su pareja.
La infanta Cristina se queja del comportamiento de la joven, por ello ahora ha sido Iñaki Urdangarin quien ha ejercido de padre y también ha decidido hablar seriamente con ella. El exjugador de balonmano voló la mañana del martes a Londres para visitar a tres de sus cuatro hijos, aunque la intención era reunirse con la benjamina de la familia. Como ya preveía el encuentro fue bastante tenso. Gracias que no le evitó el saludo en ningún momento, ni desapareció. También pudo hablar con Juan y Miguel, que son los que se encargan de controlarla.
