El matrimonio entre la reina Letizia y el rey Felipe VI se encuentra sumido en una profunda crisis, según aseguran muchas fuentes. Esta situación ha ido empeorando con el paso de los años y cada paso que dan. Dura desde 2013. Ese año fue la primera vez que la palabra divorcio sobrevoló Zarzuela.
Entonces se dijo que el distanciamiento entre Felipe y Letizia tenía que ver con el caso Nóos. Más concretamente a la presión de Letizia, que recomendó a Felipe alejar a la infanta Cristina de la familia real. La misma recomendación le hizo sobre su padre, el rey Juan Carlos I, que abdicaría en 2015 y dejaría de tener su asignación. El emérito había sido protagonista de diversos escándalos que han afectado negativamente a la imagen de la monarquía. Y Letizia temía por el futuro reinado de la princesa Leonor, lo que la habría llevado a posicionarse a favor de la abdicación y exilio de Juan Carlos I. Además, la relación con otros miembros de la familia Borbón se había visto afectada por diversos motivos, como los escándalos protagonizados por Froilán y las diferencias respecto a la educación de los hijos de la infanta Elena.
Jaime del Burgo supuso el inicio de la crisis en el matrimonio de Felipe VI y Letizia
Las discrepancias sobre la formación militar de la princesa Leonor también han influido en el distanciamiento de la pareja real. Testigos del servicio de Zarzuela han presenciado discusiones entre los reyes, marcadas por gritos y portazos.
Es cierto que estos episodios han influido en el distanciamiento de Letizia y Felipe VI, aunque según señalan varias fuentes, el verdadero motivo del inicio de la crisis fue que Felipe habría descubierto todo el pastel de Jaime del Burgo en ese 2013.
Los escoltas de Letizia, incómodos con las formas de la reina
Ahora el asunto es de dominio público. Del Burgo ha perpetrado una serie de ataques a la reina Letizia en los que la ha dejado en el punto de mira de los españoles. Y ante la creciente preocupación por la seguridad de Letizia, su escolta ha sido reforzada y ahora recibe órdenes de seguirla en todo momento. Felipe VI ha solicitado un aumento de personal ante los improperios que pueda recibir. Sin embargo, muchos escoltas no están contentos con esta situación, ya que implica pasar más horas protegiendo a la consorte y soportar sus malas formas.
La tensión ha llegado a un punto crítico recientemente, cuando Letizia perdió los nervios y abofeteó a uno de sus escoltas. Aunque no se trató de una agresión grave, el incidente ha generado incomodidad entre sus compañeros y ha dejado claro el cuestionable trato que algunos reciben por parte de la reina. Esta situación ha generado un ambiente tenso en Zarzuela y ha puesto en evidencia las tensiones que existen en la familia real española.
Cabe decir en este punto que cronistas como Jaime Peñafiel definen a Letizia como una persona agresiva y violenta. Se explica de ella un episodio en el que hizo u corte en el cuello a una de sus parejas cuando estaba en México.