El pasado martes 9 de abril, la reina Sofía fue hospitalizada en el Hospital Clínica Ruber de Madrid debido a una infección urinaria. Aunque los médicos inicialmente recomendaron un período de observación de 24 horas, su estancia se ha prolongado durante cuatro días. Este hecho ha generado preocupación sobre su verdadero estado de salud, especialmente dada su edad avanzada y su fragilidad. Aunque una infección urinaria puede considerarse rutinaria en muchos casos, en el caso de la consorte de Juan Carlos I, la situación se complica.
Los primeros en visitarla fueron su hijo Felipe y la infanta Elena, quienes llegaron al hospital con seriedad. Durante la visita, la madre de Victoria Federica y Froilán no emitió ninguna palabra, mientras que el rey Felipe quiso tranquilizar a la prensa asegurando que su madre se encontraba bien, tranquila y animada.
Los hijos de la reina Sofía están muy preocupados por su estado de salud
La familia real ha tratado el tema con cautela para evitar la propagación de rumores infundados. Por esta razón, han gestionado las visitas de familiares de manera gradual. En esta línea, el jueves fue el turno de Felipe y Letizia, quienes realizaron una visita sorpresa al hospital. Esta visita, inesperada, interrumpió sus planes, ya que los monarcas venían directamente de Las Palmas de Gran Canaria y no pasaron por Zarzuela para cambiarse de ropa.
Según fuentes de Casa Real, la reina Sofía permanecerá hospitalizada al menos toda la semana, aunque su evolución es descrita como "rápida y favorable". A pesar de la aparente tranquilidad mostrada por los reyes durante su última visita, algunos especulan que podría ser una estrategia para mantener una imagen de normalidad.
La edad avanzada de la reina Sofía ha comenzado a manifestarse con problemas típicos de su edad. En algunos eventos recientes, se ha observado que tiene dificultades para hablar y su movilidad se ha visto notablemente reducida. Aunque se ha criticado a Casa Real por permitir que continúe con sus deberes institucionales, la reina emérita es quien desea mantener ese papel.
Los tres hijos de la reina Sofía se han reunido en privado para discutir tanto su estado de salud como su futuro inmediato. Es evidente que su situación va más allá de una simple infección urinaria y que requerirá cuidados adicionales en casa. La preocupación y atención hacia ella por parte de su familia es evidente. La infanta Cristina ya ha avisado a sus cuatros hijos para que estén preparados para lo peor. De hecho, si no le dan el alta este próximo lunes, vendrán a ver a su abuela al hospital. Se desconoce si Irene Urdangarin podrá dejar su voluntariado unos días.