La larga espera llegó a su fin cuando la infanta Cristina finalmente firmó los papeles del divorcio con Iñaki Urdangarin a principios de este 2024, después de siete meses de incertidumbre. Se esperaba que el proceso se solucionara el pasado mes de junio, cuando su hija pequeña Irene alcanzó la mayoría de edad, lo que les permitía resolver el asunto en un notario y evitar un proceso judicial que podría haber expuesto detalles incómodos. Pero todo se alargó hasta enero de este año.

El detonante del proceso de separación fueron las fotos que salieron a la luz hace más de dos años, en las que aparecía Iñaki Urdangarin paseando junto a una mujer que no era Cristina. Se trataba de Ainhoa Armentia, una mujer a la que había conocido trabajando mientras cumplía el tercer grado de su pena por el caso Nóos.

Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia GTRES

Las infidelidades de Iñaki Urdangarin no eran nada nuevo para la infanta Cristina

Aquello fue una humillación para la infanta. Quedó como la gran ignorante engañada delante de toda España. A priori, no era conocedora de esta relación extramatrimonial de Iñaki. Sin embargo, surgen dudas de si en realidad si que era consciente de la infidelidad. El motivo: los correos electrónicos que intervino la Fiscalía de Palma cuando vació los ordenadores del Instituto Noos durante la instrucción del caso, que sugieren que la infanta ya sabía que el ex jugador de balonmano le había sido infiel. Y no con cualquier persona, sino con la mujer de un compañero suyo del Barça de balonmano.

Los mensajes descubiertos antes de que Iñaki ingresara en prisión fueron leídos por Cristina, quien optó por ignorarlos y mantenerse al lado de su marido mientras cumplía su condena. Según varias fuentes, la infanta estaba profundamente enamorada de Iñaki y estaba dispuesta a perdonarle todo, manteniendo la esperanza de una reconciliación.

"Dime cómo lo tienes el viernes para cenar y f…, que de f… no te libras. Valoremos hora, sitio, niños, marcaje, mantén viva la llama que es importante", se leía en uno de esos correos, enviado cuando Iñaki ya había tenido cuatro hijos con la infanta.

Correos de Iñaki Urdangarin Telecinco

El amor por su marido pesó más para la infanta Cristina que sus infidelidades

Unos mensajes descubiertos antes de que Iñaki ingresara en prisión y que llegó a leer Cristina. Sin embargo, prefirió ignorarlos y mantenerse al lado de su marido mientras cumplía condena. Según aseguran varias fuentes, la hija de Juan Carlos I estaba demasiado enamorada de Iñaki. De hecho, este amor incondicional es lo que habría retrasado la firma final del divorcio. Cristina estaba dispuesta a perdonárselo todo y tenía la esperanza de que volvieran a estar juntos. Finalmente entendió que, como la de Juan Carlos I y Sofía, su relación era una causa perdida.