La infanta Cristina está a punto de hacer un Marichalar. Zarzuela prepara el comunicado de los eufemismos: su alteza la infanta se divorcia, o como ellos dirán, protagoniza un "cese efectivo de la convivencia conyugal". Así llamaron al divorcio de Elena y Jaime de Marichalar y ahora la segunda hermana de Felipe va por el camino. Cristina ya ha visitado a un abogado según publica Pilar Eyre. La periodista catalana publica el segundo divorcio en la Casa Real. Cristina está harta, se ha desenamorado y quiere volver a la casa y la fortuna de los padres. El primer paso ha sido la foto familiar por los 80 años de Sofía. No se veía juntos a Felipe y Cristina desde hace años, de antes de estallar el caso Nóos en el año 2010. Cristina ha vuelto pero ha tenido que pagar un peaje: el divorcio. Según ha podido saber En Blau el divorcio se hará efectivo cuando Urdangarin salga de la prisión (la condena es de 6 años pero pasará no más de la mitad dentro) y la infanta no ha comunicado su intención a su todavía marido.
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Los rumores se han hecho portada. Se insinuaba que Cristina ya no creía en la inocencia de su marido porque habría descubierto nuevas infidelidades. Entre los correos filtrados por su socio Diego Torres había e-mails íntimos de Iñaki que revelaban que le ponía los cuernos a la infanta con la mujer de uno de los testigos de la boda de los duques de Palma. El duque "empalmado" estaba tan alelado que dejaba constancia escrita de sus infidelidades. Eyre lo confirma: Cristina ha contactado con un abogado matrimonialista. Como hace años la advirtieron desde Zarzuela: si te divorcias conservarás todos tus privilegios. Ahora Cristina ya no se alegra de visitar a su todavía marido en la prisión de Brieva. La relación no ha superado los barrotes de la prisión.
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Felipe y Letizia estarían felices con la noticia del divorcio, la infanta a soltado lastre. Pilar Eyre lo lleva a Lecturas y afirma que Cristina deja al marido, Ginebra y Barcelona para volver a Madrid a vivir con los dos hijos pequeños "Cristina aún sigue considerándo a Urdangarin inocente, aún cree que ha sido un cabeza de turco… Pero al amor lo ha sustituido la compasión, un soporte insuficiente para mantener un matrimonio". La infanta está buscando piso en Madrid, quizás para el próximo curso. En Madrid, Cristina ha florecido de nuevo. Ríe, tiene buena relación con sus hermanos, incluido Felipe, incluida Letizia, y adora a su padre, quien quiere verla lejos de su marido".. Y lo remata con otro símbolo: la torre de Pedralbes donde vivieron los entonces duques de Palma se ha derribado y harán pisos de lujo.
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Se derrocan el "palacete" de Pedralbes y el matrimonio de Cristina e Iñaki. Zarzuela es implacable. Un buen día el jefe de la Casa Real se levantó acusando a Iñaki Urdangarin de "conducta poco ejemplar" y lo sentenció. Los que seguimos el proceso judicial siempre supimos la máxima que había en el Estado para hacer caer a algún responsable: "él sí, ella no". Ahora Urdangarin será un Marichalar cualquiera, pero en prisión. La sangre azul tira mucho y la familia política es sustituible: adiós Jaime, adiós Iñaki... ¿Letizia la siguiente?