La infanta Cristina no quiso perderse el 87 cumpleaños de Juan Carlos I. Consciente de que su avanzada edad acerca cada vez más el final de su vida, el rey emérito desea celebrar al máximo los cumpleaños que le queden. Así lo hizo el año pasado, aunque fue reprendido por Felipe VI debido a la publicación de un reportaje a todo color en la revista ¡Hola!, donde se mostraba una celebración ostentosa y a la familia casi al completo, salvo los miembros de la actual Casa Real.
Juan Carlos I ha pasado todas las navidades en Abu Dabi, acompañado por Froilán, quien tampoco viajó a Madrid. A finales de diciembre, las infantas Elena y Cristina tomaron un avión privado para pasar una semana con su padre. Este fin de semana, algunos de sus nietos, como Victoria Federica, Juan y Pablo Urdangarin, también viajaron para festejar su cumpleaños. Sin embargo, Irene Urdangarin no pudo asistir porque ya ha comenzado sus clases en la universidad de Oxford.
El emérito no ha escatimado en gastos para esta ocasión especial. Entre los momentos destacados de la celebración, sus amigos emiratíes le obsequiaron con un espectáculo de drones que proyectó en el cielo imágenes de su rostro, tanto en su juventud como en la actualidad, junto a mensajes de "felicidades" y "muchas gracias", además de figuras como una paloma de la paz. La fiesta también incluyó fuegos artificiales y actuaciones musicales, con la participación de Los del Río y un DJ de renombre. La comida de mediodía reunió a casi un centenar de amigos y familiares, que se desplazaron para acompañarlo en su día. Como en ocasiones anteriores, las ausencias más notorias fueron las de Felipe VI, Letizia, Leonor, Sofía y la reina Sofía.
Por su parte, las infantas Elena y Cristina suelen acompañar al rey emérito el 6 de enero por la mañana para asistir a misa. Sin embargo, en esta ocasión, parece que prolongarán su estancia unos días más para compartir tiempo con su padre.
Uno más en la familia, la infanta Cristina no viaja sola
Juan Carlos estuvo acompañado por Marta Gayà, algunos de sus nietos también vinieron acompañados, Juan Urdangarin por el economista inglés que se ha convertido en un amigo muy especial y Pablo por Johanna Zott, aunque estos no salieron en la fotografía. Pero no han sido los únicos. Mientras la infanta Elena continúa soltera, la infanta Cristina ha rehecho su vida con otro hombre, un empresario catalán de su círculo de amistades. Por ello, tras la marcha de Irene, ha decidido abandonar Ginebra y comprarse una casa en Barcelona, para iniciar su nueva historia de amor. Lo lleva muy en secreto y no quiere que trascienda a la prensa. Por ahora no ha aparecido ninguna fotografía de ambos juntos en actitud cariñosa ni cómplice.
La infanta Cristina se sabe todas las estrategias para esconderle. Alquila varios coches, siempre cambia de matrículas y lo hace con vehículos totalmente tintados para que no se puede ver el interior.
Juan Carlos le ha permitido a la infanta Cristina que aparezca con su pareja, ya le conocen todos los Borbón, a excepción de Felipe VI y Letizia. También sus hijos, los Urdangarin.