La infanta Cristina ha vivido uno de sus peores años. Se enteraba de su separación mediante la prensa. Iñaki Urdangarin le fue infiel con su actual pareja, Ainhoa Armentia, a quien conoció en el bufete de abogados que trabajó tras salir de prisión. Los dos están muy enamorados y la hermana de Felipe se ha quedado completamente sola y humillada. Y no solo eso, el exjugador de balonmano está dispuesto a vivir a cuerpo de rey a su costa. Las cuestiones económicas son el principal problema del divorcio entre ambos.
Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina se volverán a ver las caras la próxima semana con motivo del cumpleaños de Irene Urdangarin. El pasado 5 de junio alcanzó la mayoría de edad, pero lo celebró con su madre de forma privada. La próxima semana la hermana de Felipe ha organizado una fiesta para celebrar este día tan especial y la graduación de la joven. Dos en uno.
La infanta Cristina no invita a Leonor y Sofía
La infanta Cristina ya tiene preparada la lista de invitados, entre los que figuran algunos compañeros de Irene que también se gradúan ese mismo día. La Borbón quiere aprovechar esta ocasión para celebrar una reunión familiar. La última vez que se vieron todos juntos fue en el funeral de Constatino de Grecia, aunque Felipe y Letizia no mantuvieron palabras con el resto, y Leonor y Sofía no vinieron al acto.
Por supuesto, los hermanos de Irene Urdangarin no faltarán a este evento. Juan, Miguel y Pablo han despejado unos días para volar hasta Ginebra, todos juntos. Iñaki también aparcará las diferencias con Cristina para estar en ese día tan especial. La reina Sofía también ha aceptado la invitación, como la infanta Elena y Victoria Federica.
Leonor y Sofía serán las grandes ausencias del cumpleaños. La infanta Cristina ya no se ha molestado ni a invitarlas porque sabe que recibiría la negativa de sus padres, especialmente de Letizia, quien no quiere que las niñas se junten con sus primos.
Felipe estaría encantado de acudir al evento familiar, pero Letizia se niega y no quiere una nueva discusión. Ella es quien manda en casa. Al rey le duele que sus hijas pierdan el contacto con sus familiares. La familia real está cada vez más distanciada, hay dos bandos claramente diferenciados. Por un lado, los reyes con sus hijas, y por otro las infantas Elena y Cristina y sus respectivos hijos. A éstos últimos hay que sumarles a Juan Carlos. La reina Sofía sería neutral.