El divorcio puede ser un proceso doloroso y complicado, especialmente cuando hay hijos involucrados. En el caso de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, el proceso de separación ha llevado más tiempo del esperado y parece haber algunas complicaciones en el camino.
El mes pasado, Irene Urdangarin, la hija más joven de la pareja, cumplió 18 años, lo que marcaba el inicio del proceso de divorcio. Se esperaba que Cristina e Iñaki pudieran firmar los papeles de divorcio en un notario, evitando así el paso por el juzgado y posibles filtraciones. Sin embargo, han pasado varias semanas y el divorcio aún no se ha concretado.
Solo falta la firma
Según revelaciones del periodista Juan Luis Galiacho y varios medios de comunicación, se dice que Urdangarin ha solicitado dos millones de euros y una pensión vitalicia de 25.000 euros al mes para mantener silencio después de la separación. Durante su tiempo en la cárcel de Brieva, aprovechó para escribir sus memorias, en las cuales se dice que revela secretos sobre el rey emérito Juan Carlos y su círculo de amigos millonarios y poderosos. Además de la compensación económica, Iñaki también desea tener acceso a propiedades de la familia real, incluyendo la casa en Baqueira y el chalet en Bidart.
Para evitar que salgan a la luz posibles revelaciones incómodas, el rey emérito habría aconsejado a su hija que aceptara todas las demandas económicas de Urdangarin y que él se haría cargo de los pagos. Parece que el abuelo está dispuesto a pagar la cuenta con tal de evitar problemas mayores.
Cristina busca un acercamiento a Iñaki Urdangarin
A pesar de todo, esta situación ha afectado profundamente a Cristina. Descubrir la infidelidad de Iñaki fue un golpe duro y doloroso para la infanta, y no puede evitar guardar rencor hacia el padre de sus cuatro hijos. Sin embargo, por el bien de sus hijos, Cristina está dispuesta a tragarse su orgullo y buscar una buena relación con su ex esposo.
Una de las circunstancias que podría facilitar este acercamiento sería la salida de Ainhoa de la vida de Iñaki. Ainhoa Armentia, a quien Cristina considera una traidora, ha terminado su relación con él. Para los hijos y para Cristina, sería una buena noticia que Ainhoa desapareciera de sus vidas. Sin embargo, parece difícil que la nueva novia de Iñaki desaparezca por completo. Aunque también han roto su relación, tanto Iñaki como Ainhoa han invertido mucho en su amor y no renunciarán fácilmente a él. Si Cristina busca una reconciliación, deberá aceptar que Ainhoa seguirá presente en la vida de su ex esposo.