Las más recientes revelaciones sobre la vida privada de la infanta Cristina y su exmarido, Iñaki Urdangarin, han sacudido los cimientos de la realeza española. Según nuevas informaciones, Cristina habría tolerado durante años que el exduque de Palma mantuviera relaciones con otras mujeres. ¿El motivo? Evitar un escándalo público que empañara aún más la ya cuestionada imagen de la Casa Real.

Fuentes cercanas aseguran que la hija del rey emérito Juan Carlos I conocía y aceptaba estas aventuras, algunas incluso con mujeres cercanas a su entorno. Todo esto, en un desesperado intento por mantener su matrimonio, ya que estaba profundamente enamorada de él, y por proteger a sus hijos del impacto mediático que podría acarrear un divorcio.

El descaro de Iñaki: Mensajes explícitos y amantes en cada esquina

Los rumores de infidelidad de Iñaki Urdangarin no son nuevos, pero ahora salen a la luz detalles impactantes que confirman la magnitud de sus aventuras amorosas. Desde el inicio de su relación con Cristina, ya se especulaba sobre su falta de lealtad. Sin embargo, las primeras evidencias concretas no se conocieron hasta 2012, en pleno escándalo del caso Nóos. En aquel entonces, salieron a la luz mensajes comprometedores entre el exjugador de balonmano y una mujer que no era su esposa. Estos textos revelaron que las infidelidades no eran hechos aislados, sino parte de un patrón de comportamiento habitual.

Cristina e Iñaki Urdangarin

Entre las presuntas amantes de Urdangarin se encuentran tanto desconocidas como mujeres del círculo cercano de la infanta. Uno de los episodios más impactantes involucra a la esposa de un compañero del equipo de balonmano del Barça, con quien intercambió mensajes explícitos que fueron filtrados. “Dime cómo lo tienes el viernes para cenar y follar, que de follar no te libras”, decía uno de ellos, desatando un escándalo mediático sin precedentes. Además, se rumorea que Urdangarin también tuvo un romance con Corinna Larsen, la polémica ex amante de Juan Carlos I.

Bidart: el principio del fin de un matrimonio en ruinas

A pesar de los constantes rumores y pruebas de infidelidad, la infanta Cristina logró mantener su matrimonio durante años, hasta que las imágenes de Urdangarin con Ainhoa Armentia en la localidad francesa de Bidart se volvieron virales en 2022. Estas fotografías marcaron un punto de no retorno. Aunque Cristina había soportado décadas de humillaciones, esta exhibición pública fue demasiado incluso para ella. Según la experta en la Casa Real, Maica Vasco, Urdangarin habría utilizado esta estrategia para humillarla públicamente y forzarla a pedir la separación, librándose así del compromiso matrimonial sin tomar la iniciativa.

Infanta Cristina

El matrimonio, que sobrevivió a la tormenta del caso Nóos y a años de traiciones, finalmente llegó a su fin. En enero de 2022, tras 24 años juntos y cuatro hijos en común, anunciaron su separación. Mientras Iñaki comenzaba una nueva vida junto a Ainhoa, Cristina se centraba en reconstruir la suya lejos de los focos. La ruptura, oficializada este año con un divorcio definitivo, dejó al descubierto los oscuros secretos de una relación que, aunque a ojos del público parecía ejemplar, estaba marcada por el engaño, la humillación y el sacrificio personal de la infanta Cristina, quien lo soportó todo para proteger a su familia y la imagen de la realeza. Sin embargo, esta última traición evidenció que hasta la paciencia más estoica tiene un límite.