Cuando el caso Nóos involucró a Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, Casa Real enfrentó una crisis sin precedentes. Para proteger la imagen de la monarquía, el rey Felipe VI y la reina Letizia tomaron una drástica decisión: excluir a algunos miembros de la familia real de los presupuestos del Estado. Así, las infantas Elena y Cristina quedaron sin la generosa asignación anual que solían recibir. En medio de un escándalo mediático y acorralada por la prensa, la infanta Cristina tomó la decisión de huir a Ginebra, Suiza, junto a su hija menor, Irene Urdangarin, para comenzar una nueva vida lejos de España.
Sin embargo, el destino de la infanta Cristina dio un giro inesperado cuando encontró una nueva oportunidad laboral en la Fundación Aga Khan. Según revelaciones de la periodista Pilar Eyre, Cristina estaría ganando unos 33.000 euros al mes por su trabajo en proyectos de cooperación internacional en países en desarrollo. Esta suma estratosférica equivale a unos 400.000 euros anuales, superando ampliamente los ingresos de la mayoría de los ciudadanos españoles. Con esta nueva fuente de ingresos, Eyre asegura que, "en el futuro, (Cristina) será una mujer adinerada y continuará manteniendo a sus hijos con su propio sueldo, tal como lo ha hecho hasta ahora".
La independencia financiera de la infanta Cristina: manteniendo a sus hijos con su propio sueldo
A diferencia de lo que se podría llegar a pensar, la estabilidad económica de la infanta Cristina no se ha visto afectada por la separación de Urdangarin. No depende de él para subsistir, ya que tanto su futuro como el de sus cuatro hijos están bien asegurados, y esto no se debe únicamente a su pertenencia a la realeza española. Según reveló Pilar Eyre, "Miguel vive en Londres y asiste a una universidad muy costosa, mientras que Pablo está en Barcelona. Juan, por su parte, se encuentra en Madrid y ha sido el que más ha sufrido debido a la situación de su padre, por lo que ha recibido ayuda profesional". Y aunque Iñaki debería contribuir, Cristina es capaz de hacer frente a los elevados gastos de los estudios de sus hijos sin la ayuda de su futuro exesposo. En particular, la École Hôtelière de Lausana, el centro universitario de hostelería en el que estudiará próximamente su hija Irene. Y es que, los gastos de estudiar en este centro educativo solo son accesibles para unos pocos privilegiados, ya que ascienden a unos 35.000 euros por curso.
El poder del dinero: acuerdos con Iñaki Urdangarin y su vida en Ginebra
Además, la hermana de Felipe VI también se hace cargo de algunos de los gastos del exduque de Palma, dado que él recibe una generosa cantidad mensual como parte de un acuerdo entre ambos y también se hace cargo de los gastos de sus viajes y alojamiento en Ginebra cuando visita a la familia. Ahora, alejada de los reflectores y viviendo una nueva vida en Ginebra, la infanta Cristina ha encontrado en su trabajo para la Fundación Aga Khan una fuente inagotable de riqueza. Con un sueldo de ‘nueva rica’, Cristina se coloca en un privilegiado grupo de personas que ostentan altos ingresos, superando a la gran mayoría de los ciudadanos españoles.