Según apuntaron varios medios durante algunas semanas a principios de este verano, estaba previsto un encuentro multitudinario en Marivent. Se hablaba de una reunión familiar con el círculo cercano de la familia real. Iban a viajar a Mallorca las infantas Elena y Cristina junto a los hijos de ambas, coincidiendo con la estancia del rey Felipe, la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Incluso se especuló con la presencia del rey emérito Juan Carlos I, que esos días iba a estar por Sanxenxo.
Un encuentro en el que comentaban que la reina emérita Sofía tenía puestas muchas ilusiones. No le quedan muchas oportunidades para ver a su familia reunida de nuevo, lo que hacía de ello un momento único y, muy posiblemente, irrepetible.
Las infantas Elena y Cristina, vetadas
Sin embargo, al final la foto no se produjo. No hubo nada de los rumores que habían circulado. Parece ser que todo fue una invención de algún medio de comunicación. De hecho, no solo no hubo encuentro, también hubo veto.
Se les comunicó a las infantas Elena y Cristina que no aparecieran por Marivent mientras Felipe y Letizia estuvieran allí. La reina Letizia no quería una foto familiar en la que no cree y que no quiere que circule por los medios. Demasiado tiempo lleva luchando por limpiar la imagen de la monarquía como para perder todo lo conseguido por una imagen.
La infanta Elena llama a la reina Letizia
Una prohibición que molestó mucho a las infantas. Sobre todo a Elena, que considera que no ha hecho nada para recibir este desprecio. Está harta de las exigencias de Letizia y de que la consorte marque perfil, incluso con sus hijos Froilán y Victoria Federica. Y así se lo quiso decir por teléfono. Pretendía soltarle todo lo que pensaba.
Letizia, sin embargo, no respondió. Dejó la llamada en el buzón de las perdidas. No ha hablado con Elena ni quiere tener trato con ella. Y, por supuesto, no le devolvió la llamada.